domingo, 19 de mayo de 2024

Cuestión de actitud (+Video)

Los objetivos, además de hacernos capaces de saber por qué hacemos realmente las cosas y hacia donde nos dirigimos, deben ser buenos y constructivos...

Alberto Jesús Quirantes Hernández
en Exclusivo 29/03/2021
4 comentarios
Mujer cubana 7
Los objetivos personales son metas o deseos que se proponen las personas a sí mismas. (Alejandro Leonardo Benítez Guerra / Cubahora)

Una vida sin objetivos, donde se vive el día a día sin saber hacia dónde se marcha, puede ser fuente de trastornos psíquicos y de conflictos de toda índole, pues un cerebro desocupado puede coger por cualquier rumbo, incluso, los peligrosos o los autodestructivos.

Los objetivos, además de hacernos capaces de saber por qué hacemos realmente las cosas y hacia donde nos dirigimos, deben ser buenos y constructivos.

La vida, con sus anhelos y esperanzas, alegrías y frustraciones, está ahí cada día, como un gran río que se desliza a veces calmo, en ocasiones turbulento, pero que cada cual debe saber dirigirlo a su conveniencia y jamás hundirse en sus aguas.

LAS INTENCIONES

El nivel psicológico de nuestras intenciones comprende tanto los impulsos subconscientes como la racionalidad. Mediante nuestra actividad mental racional podemos analizar las situaciones, prever peligros y ver los mejores caminos hacia el éxito.

El vulgar interés y el miedo tienen su importancia en este ámbito, pues a menudo el deseo desproporcionado de dinero o fama o el terror por nimiedades es lo que dinamiza muchas actividades. Sobre todo no alcanzar los intereses materiales según metas propuestas puede sumir en la frustración a muchas personas que han puesto a esos objetivos como su meta principal.

Hay otro tipo de impulsos, que podemos denominar de índole espiritual; habitualmente no somos conscientes de ellos, pues es una intervención invisible en nuestros propósitos, y no siempre nos damos cuenta de su existencia. Se puede definir esa intervención como la convergencia de diversas fuerzas psicofísicas que culminan en la esfera consciente como pensamiento, sentimiento, voluntad y acción. Es por qué y para qué hacemos las cosas, es el sentido de nuestros actos.

BUENOS Y MALOS OBJETIVOS

Pueden diseñarse buenos o malos objetivos. Los primeros son aquellos que están exentos de engaño o de deseo consciente de dañar, mientras que los segundos pueden ser perjudiciales a otras personas.

En este segundo caso, los hay con clara intención de hacer daño por parte de desalmados o psicópatas, o simplemente como “daños colaterales” cuando se realiza un camino aplastante y sin miramientos, pues en estas personas el fin pretende justificar los medios.

Pero la buena intención es ampliamente valorada en cualquier sociedad, incluso cuando no llega a alcanzar su objetivo. Mientras que la mala intención, aunque ni siquiera llegue a exteriorizarse, se intuye o se presiente en los otros como algo nocivo e inquietante.

LA FUERZA DE LOS PENSAMIENTOS

En todas las creencias se afirma que nuestros actos, bien sean pensamientos, palabras y acciones propiamente dichas, suelen tener repercusiones, físicas o sutiles, que condicionan nuestro presente y futuro. Se cosecha lo que se siembra, como bien ha sido demostrado.

La mayoría de nuestras acciones en pos de nuestros objetivos pueden ser consideradas como creadoras del llamado karma “positivo” o “negativo”. Por eso hay que tener cuidado con lo que se desea, porque podría hacerse realidad. La intención en nuestras acciones es una fuerza poderosa que, mediante la ley de atracción de lo semejante, tiende a materializar lo que inicialmente es un impulso de la mente.

Hacer el bien significa que, mediante el gesto, la palabra y la acción se transmite, pero también se recibe por el emisor, una buena influencia.

CLARIDAD DE OBJETIVOS

Es cierto que, en buena medida, nuestros objetivos determinarán lo que somos y lo que deseamos ser o lo que probablemente vayamos a ser. Por eso es importante, ya desde la infancia, tener una imagen muy definida de lo que serán nuestros propósitos futuros.

No se conoce hasta qué punto la intención humana en base a los objetivos propuestos puede modificar la realidad, para bien o para mal. No solo el ADN determina el comportamiento de los genes, sino que también lo hacen el medio ambiente y hasta los propios pensamientos.

Por eso la capacidad transformadora de unos buenos objetivos en la mente de muchas personas es, pues, un factor de primer orden para mejorar la sociedad y a nosotros mismos.

EN NUESTROS OBJETIVOS SE DEBE TENER EN CUENTA LA MENTE

La meditación y otras técnicas mentales recomendadas por la psiquiatría moderna resaltan la importancia de conectarse periódicamente con nuestro ser interior y encontrar allí la paz y la alegría que a menudo buscamos en vano fuera de nosotros.

Todos los estados conducentes al éxito encuentran su origen en la mente. Si uno habla o actúa con un pensamiento impuro solo se obtiene un rebote y el sufrimiento viene detrás. Pero si uno lo hace con un pensamiento puro, entonces la felicidad le sigue como una sombra.

ACTITUDES COTIDIANAS PARA NUESTRO BENEFICIO

Para muchos sería bueno rediseñar sus procesos mentales que, con el tiempo, forman patrones de comportamiento que condicionan la intención con la que hacemos las cosas y de ahí alcanzar felizmente el logro de sus objetivos.

No es preciso entrar a un templo para contemplar la realidad con otros ojos para nuestro entero beneficio, pues suele bastar con cambiar de actitud. Uno de ellos es agradecer lo cotidiano sintiendo gratitud hacia las muchas cosas ya logradas debidamente.

El otro beneficio es alegrarse de la felicidad ajena porque es también muy positivo para nosotros además de divertido y reconfortante, participar sinceramente de la alegría de los demás con sinceras y bonitas risas y sonrisas.


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Alberto Jesús Quirantes Hernández

Profesor Consultante y Jefe del Servicio de Endocrinología del Hospital Docente Dr. Salvador Allende en La Habana, Cuba.

Se han publicado 4 comentarios


Dayamí
 29/3/21 18:43

Un gran artículo hecho por un pofesional de gran experiencia de la vida a la que le sabe un mundo. Lo que dice es porque lo ha vivido y en grande. Aun más éxitos le deseo al autor.

Sara Gende
 29/3/21 11:39

Me encantan sus consultas y videos..

Quisiera saber si puede dar consultas privadas para mejorar mi salud

gracias

Sara

M.Sc. Dr. Quirantes
 30/3/21 8:02

Estimada Sara, en mi país la asistencia médica es gratuita. No obstante puede darme su correo pues puedo orientarla en cuanto a su salud. Afectos,

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Carlos de New York City
 29/3/21 11:08

 Busque muchas palabras dentro de mis propios sentimientos, que hubieran partido de lo mas profundo de mi alma y de mi ser ,para dedicarle unas palabras de agradecimiento a utds como medicos y seres humanos , que e borrado las anteriores, plasmo unicamente estas simples letras de mi mas alta gratitud y respeto  asi  mismo de que no hay nada mas bello en la vida que servirnos a nosotros mismos de orgullo personal y digno de vivir dandole un sentido a nuestras vidas,muchas veces e usado este pensamiento mio para escribir sobre algo,mi mayor felicidad en la vida es haberme sentido HIJo de unos Grandes pobres y humildes Seres Humanos como mis Padres, tambien mi Familia de ellos,creo sinceramente ,que desde el mismo vientre de mi Madre y apoyado dandole gracias a mi Padre por haberme engendrado los sentimientos de amor y respeto por la vida que ellos mismos me supieron inculcar y eramos pobres , como yo mismo soy Pobre pero millonario a la misma vez sin dinero , no me intereza, se que hace falta para vivir, pero no ni nunca jamas para hacerme feliz porque feliz e sido dando siempre mi amor y respeto por la vida y a mi mismo.Sinceramente,es genial y hermoso como verdadero este articulo.! Sobran las palabras!

! Gracias !    Dr. Alberto Quirantes Hernández

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