“¿Adónde va la América, y quién la junta y guía? Sola y como un solo pueblo, se levanta. Sola pelea. Vencerá sola”. Esa afirmación de nuestro Héroe Nacional José Martí, hace casi 130 años, adquiere vigencia y fuerza durante estos días, en República Dominicana, donde se desarrolla hasta hoy la V Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), ese mecanismo de paz, de unión e integración efectiva y real.
En un momento donde la región se encuentra en un contexto complejo ante la ofensiva del imperialismo contra la integración latinoamericana y caribeña y los procesos progresistas de la región, diversos movimientos sociales y fuerzas políticas siguen comprometidos con la creación de un futuro común, en defensa de la soberanía del territorio, así como trabajando para impulsar la unidad dentro de la diversidad que caracteriza a los 33 países miembros de la Celac.
Así se evidenció durante el Encuentro de Movimiento Sociales y Fuerzas Políticas por la Paz, la Unidad y la Integración de Nuestra América, que se desarrolla previo a la Cumbre, y donde alrededor de 400 participantes llegados de 15 naciones del continente hasta la Universidad Autónoma de Santo Domingo, manifestaron su determinación de sumarse a la lucha común por la soberanía nacional, la democracia, el desarrollo sostenible y la garantía de los derechos humanos a los habitantes de esta región.
Cuba estuvo muy bien representada en esa cita y también alzó su voz, pues siempre ha defendido que la solidaridad no es dar lo que nos sobra, sino compartir lo que se tiene, y porque como proclamara sabiamente Fidel en 1992, durante la sesión inaugural de la Segunda Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno, en Madrid, España, “divididos, nuestros pueblos no podrán garantizar su independencia, el respeto de los poderosos, el bienestar a que aspiramos y un lugar decoroso en el mundo”.
Si algo distinguió a la delegación cubana fue esa representación tan diversa que llevó la Isla, como diversos son sus más de 11 millones de habitantes y las más de 2 200 organizaciones de su sociedad civil que aportan cada día al desarrollo de la nación. Allí estaban estudiantes, investigadores, intelectuales, religiosos, deportistas, blogueros, artistas… Todos con un solo propósito: aunar esfuerzos para consolidar y fortalecer los lazos de unidad y la concertación entre las naciones.
Al llegar este miércoles a Cuba, Cubahora conversó con jóvenes participantes en el Encuentro de Movimiento Sociales y Fuerzas Políticas, esa cita donde se aprobó una Declaración de respaldo a la Celac, entregada durante la Cumbre a los presidentes, con el fin de que contribuya aún más a la consolidación y el fortalecimiento de ese importante mecanismo de concertación y acción mancomunada de nuestros países, en defensa de los intereses y derechos de las naciones y los pueblos.
Xavier Arrué Pinto, profesor de la Universidad de Oriente; Heidy Villuenda Ortega, presidenta de la Organización Continental Latinoamericana y Caribeña de Estudiantes (Oclae) y el joven discapacitado Jorge Enriquez Jerez Belisario, periodista del semanario camagüeyano Adelante, explicaron que a través de dos mesas de trabajo los representantes de las diferentes naciones alzaron su voz contra el imperialismo, por la soberanía y la autodeterminación y por la defensa de la paz, la unidad e integración.
Añadieron que la defensa de esas ideas son muy necesarias en momentos en que llega al poder el presidente estadounidense, Donald Trump, quien se ha pronunciado contra los proyectos progresistas existentes en la región, y que por ello todos los participantes en el Encuentro se comprometieron en hacer cuantos esfuerzos sean precisos para poner la fuerza popular en pie, y así formar una barrera infranqueable contra las pretensiones del imperialismo estadounidense y sus aliados.
Tras participar en el evento Xavier comentó que se observa un movimiento que articula todas sus fuerzas en lograr cada vez más una integración popular. De igual forma sigue siendo Cuba la fuente de inspiración y Fidel el guía de la unidad y de la acción revolucionaria progresista para levantar a América Latina. Debemos seguir buscando la unidad en la diversidad.
“Los jóvenes y estudiantes somos parte de esa levadura revolucionaria, por nuestra fuerza, resistencia, por las ideas renovadoras que podemos aportar en todos los espacios y porque en nosotros está el presente y el futuro mejor para el continente y la región”, destacó el joven, quien añadió que el levantamiento del bloqueo a Cuba y la devolución del territorio ocupado por la Base Naval de Guantánamo, fueron puntos claves en la Declaración aprobada.
Agregó que igualmente se respaldo la Proclamación de América Latina y el Caribe como Zona de Paz, como fuera acordado en 2014 en la Segunda Cumbre de la Celac, la denuncia de los intentos de militarización e injerencia por parte de Estados Unidos, el derecho a la independencia de Puerto Rico, así como el apoyo a Venezuela ante la Orden Ejecutiva estadounidense que la califica como una amenaza, entre otros asuntos.
Heidy apuntó que mecanismos como la Celac responden a la historia de América. “Recordemos que el Apóstol cubano José Martí explicaba la necesidad de unir a Nuestra América. Hoy que la región vive una coyuntura más compleja con una ofensiva neoliberal del imperialismo y la derecha en muchos de nuestros países, el camino de los movimientos sociales y fuerzas políticas regionales no puede ser otro que la búsqueda de más integración, unidad y solidaridad para hacer frente a esta coyuntura”.
Luego de destacar que “si no fuese por la Revolución Cubana no estaría vivo...”, Jorge Enríquez, subrayó: “cuando uno viene a estos eventos donde confluye la izquierda, te das cuenta de lo que significa la Mayor de las Antillas para los luchadores del mundo; eso lo hemos sentido acá. La Isla no ha dejado de ser el faro de América Latina y su liderazgo es indiscutible.
“También cuando escuchas otras realidades del continente y comparas con la tuya arribas a una conclusión muy fácil, tenemos que cuidar lo que tenemos, la lucha de los pueblos, movimientos sociales y fuerzas políticas del continente es por alcanzar nuestras conquistas, esas que a veces creemos merecer por obra divina. Estos eventos vienen a ser el espejo que tantas veces nos falta o por tiempo no nos miramos en él”, agregó.
Entonces, esta cita continental nos vuelva a demostrar que ha llegado el momento de cumplir con hechos la voluntad de quienes —como Bolívar y Martí, Chávez y Fidel—soñaron una gran patria común para nuestros pueblos. Como decía el líder histórico de la Revolución Cubana, al valorar la constitución de la Celac, este ha sido el hecho institucional más importante en América Latina en el último siglo, donde se materializan los sueños de unidad, de justicia y soberanía de los grandes hombres y mujeres de esta tierra.
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