viernes, 29 de marzo de 2024

Sumbe en la memoria

La heroica resistencia de un contingente de civiles cubanos en la República Popular de Angola impidieron entregar la ciudad costera a manos del enemigo ...

Jose Valentín Rodríguez Pérez en Exclusivo 25/03/2018
4 comentarios
Aviacion en Sumbe
La rápida reacción e intervención de la aviación y de las tropas cubanas de Asalto enviadas por la Misión Militar en Luanda, hizo huir a los enemigos, quienes fueron perseguidos y sufrieron numerosas bajas.

Qué lejos estaba de imaginar el joven médico Norberto García Mesa que después de regresar eufórico de la boda de la hija del director del Hospital “17 de Setembro” de la Provincia de Kuanza Sur, en los hangares del aeródromo local, el estruendo de los morteros y la fusilería pesada de las tropas de la UNITA lo despertarían antes del amanecer entre sobresaltado y confuso, pensando que eran los fuegos artificiales de los Carnavales de la Victoria que transcurrían ese fin de semana.

Casi a medio vestir, apenas pudo atinar a ponerse el uniforme verde de las Fuerzas Populares de Defensa y reunirse en el punto de concentración. El profesor Héctor Pineda —responsable de armamento— le entregó una flamante PPSH sin el disco puesto y ante la demora en cargarlo, que llevaría varios minutos por la falta de pericia, reclamó un M 52. De allí salió presto hacia uno de los puntos de resistencia donde se encontraba el edificio de la UNECA, cerca de la playa.

Gracias a una persistente gestión —me contaba el Dr. Norberto García—, días antes del ataque contrarrevolucionario, Orlando González llevó desde Luanda las armas empleadas por sus compañeros, al frente de los cuales estuvo hasta que fue gravemente herido.

El sábado 24 de marzo se inició en la ciudad de Sumbe el Carnaval de la Victoria, y en horas de la noche de ese mismo día los cubanos despedirían a varios cooperantes que concluían su misión. Seguramente la Unión Nacional para la Independencia Total de Angola (UNITA) poseía esa información, por lo cual ejecutaron el ataque a la ciudad en el amanecer del domingo, calculando que no existiría ninguna resistencia organizada.

El domingo 25 de marzo de 1984, en la costera ciudad de Sumbe, capital de la provincia de Kuanza Sur, a unos 400 kilómetros de Luanda, en la República Popular de Angola, un grupo de maestros, constructores y médicos cubanos, junto a combatientes angolanos, rechazaron heroicamente un intenso ataque sorpresivo de fuerzas de la agrupación Unión Nacional para la Independencia Total de Angola (UNITA), en número superior a los 1500 efectivos con todo tipo de armamentos.

La dirección central de la UNITA se proponía dar un golpe contra un objetivo donde no existieran fuerzas regulares de defensa, de manera que influyera en el curso ulterior de la guerra, al tomar por vez primera una importante capital provincial relativamente cerca de Luanda, además, secuestrar un significativo número de rehenes entre colaboradores civiles de distintas nacionalidades y dirigentes locales, para trasladarlos a la base principal en Jamba, y de esta manera manipular la opinión pública internacional y ejercer presión sobre el gobierno de Angola.

En la ciudad no habían tropas regulares de las Fuerzas Armadas Populares de Liberación de Angola (FAPLA) ni de la Misión Militar Cubana. Además de los habitantes del lugar estaban en la ciudad un grupo de cooperantes civiles de diferentes nacionalidades, entre ellos 230 cubanos.

Al diseñar su plan de ataque a Sumbe, la UNITA no supo valorar la empatía lograda en Kuanza Sur entre la dirección angolana y la colaboración civil cubana. Esta estrecha coordinación permitió constituir el Comando Unificado de Defensa (CUD), que bajo el mando del comisario provincial, José Francisco Ramos da Cruz, integró todas las fuerzas bajo un plan general para hacer frente al ataque, bajo un solo anillo defensivo dividido por sectores para hostigar al enemigo por varios flancos.

Después de cinco horas de enfrentamientos, las fuerzas de la UNITA habían conseguido penetrar en unas tres cuartas partes de la ciudad y tomar el aeropuerto, pero no lograban quebrar los tres puntos de resistencia donde se encontraban los cubanos, que continuaban batiéndose heroicamente.La rápida reacción e intervención de la aviación y de las tropas cubanas de asalto, enviadas por la Misión Militar en Luanda, hizo huir a los enemigos, quienes fueron perseguidos y sufrieron numerosas bajas.

Pude apreciar, al conversar con el Dr. Norberto García Mesa, la convicción del deber cumplido, la marca que ha dejado en él Sumbe y el recuerdo de sus compañeros caídos en la batalla. Visiblemente emocionado cuando recuerda ese acontecimiento que marcó su vida revolucionaria, lo narra como si el suceso hubiera transcurrido pocas horas antes.

Han pasado 34 años de aquella memorable victoria y no pasa al olvido. Sumbe constituye una página histórica de la juventud cubana en el cumplimiento de misiones internacionalistas. El heroísmo demostrado por nuestros colaboradores civiles, quienes se enfrentaron valientemente a fuerzas militares bien pertrechadas y muy superiores en número, dignifica la voluntad de todo un pueblo de defender los ideales aún al precio de sus vidas.

Recordar la historia es un deber tan sagrado como defender el presente, por eso entiendo al Dr. Norberto García cuando evoca aquel pasaje con la vehemencia de quien podría repetir la hazaña si fuera necesario.

 


Compartir

Jose Valentín Rodríguez Pérez

Periodista y analista político

Se han publicado 4 comentarios


amarilis
 21/3/19 10:36

Aquí en Holguín, en el Centro Universitario de Cueto hay un profesor que estuvo allí como miembro del Destacamento Pedagógico Internacionalista Che Guevara.El lunes 25 tendremos un intercambio con él en la sede Celia Sanchez Manduley,  a las 10 am Invito al corresponsal de Juventud Rebelde a escuchar sus vivencias.Era casi un niño.Esos son nuestros NIÑOS HEROES

Zelarn
 25/3/18 12:19

Muy interesante y oportuno este artículo. Nuestros muertos no están ni pueden estar olvidados. La batalla de Sumbe resume la valentía de todo un pueblo decidido a enfrentar la agresión enemiga bajo cualquier cielo en que nos encontremos.

Pepe
 25/3/18 11:30

Sumbe es un ejemplo de resistencia y valor.Jovenes civiles detuvieron la ocupacion de la ciudad y evitaron caer prisioneros de las tropas elites de la UNITA. Se batieron heroicamente.Esta fecha merece ser recordada en cada aniversario y siempre.

Nadie se puede olvidar.Es una leccion de historia patria.

senelio ceballos
 25/3/18 4:24

GLORIA ETERNA A LOS CAIDOS!!!!......Aqui en la escuela  - academia militar de Volgogrado..Tenemos actualemte una veintena de jovenes de angola.......Cuando estuve en sus albergues para tomar unos traguitos de cafe...Vi banderas de la FAPLA y de la UNITA.....Todos juntos en un peloton marcharon hacia las aulas......QUE TRISTE que los los cubanos caidos alli en tierras africanas..no han podido ver este espectaculo!!   Me conmovieron!!!.....Me decian todos somos hijos de Angola!!!

Deja tu comentario

Condición de protección de datos