viernes, 29 de marzo de 2024

Entre goleadas y sorpresas en octavos

El triunfo de 4-0 del club París Saint Germain ante el favorito Barcelona español, matizó una de las grandes sorpresas en los octavos de final...

José Luis López Sado en Exclusivo 16/02/2017
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Dí María
Di María marcó dos goles para el PSG ante el Barcelona.

Retornaron las gambetas a los gramados europeos. Este miércoles cerraron las acciones de los primeros cuatro partidos de ida -de los ochos previstos-, en la fase de octavos de final de la Liga de Campeones del fútbol de Europa. Y sin duda alguna, la gran sorpresa la tributó el club París Saint Germain (PSG), que en rol de anfitrión, dejó casi listo su avance a los cuartos de final, con una escandalosa goleada de 4-0 ante el favorito Barcelona español, en la cancha del Palacio de los Príncipes.

Unai Emery, director técnico del cuadro galo, no se lo pensó dos veces e indicó una estrategia que le brindó excelentes resultados: presión desde arriba e intento de bloqueo de la salida de los veloces extremos del Barcelona. En el mediocampo, Marco Verrati y Adrien Rabiot les ganaron la apuesta a Sergio Busquets y André Gomes, no solo en la recuperación de esféricas, sino también en los pases efectivos a los jugadores más desmarcados.

Además, los hombres de ataque del PSG, en especial Edison Cavani, Ángel Di María y su nueva contratación, el alemán Julian Draxler, le dieron un recital de baile a la maltrecha defensa catalana, que les vio las espaldas en reiteradas ocasiones. ¿Y el afamado tridente del Barcelona, integrado por Messi, Neymar y Luis Suárez? Bien, gracias. Apenas se mostró sobre la cancha. Solo el brasileño intentó acercarse al área, pero fue bien repelido por la zaga gala.

Di María, en el día de su cumpleaños 29, marcó dos goles para el PSG, uno de los cuales mediante un genial cobro a balón parado. Igualmente anotaron Draxler y Cavani, que también estaba de cumpleaños. Además, la goleada no fue mayor, gracias a varios manotazos providenciales del cancerbero Ter Stegen.

La historia del fútbol de Europa reporta que ningún club ha remontado un 0-4. Por eso, pienso que la Messi-dependencia no tiene argumentos para remontar un marcador con tanta desventaja. O lo que es lo mismo a decir: se acabó la Champions para el Barcelona.

Algo similar podríamos comentar del Bayern Múnich alemán, que dio un paso firme de cara a los cuartos de final. En su cancha del Allianz Arena, y apoyado en el tino y los goles de su volante creativo Thiago Alcántara, goleó 5-1 al Arsenal inglés, que no tuvo un minuto de respiro.

Thiago manejó el ritmo del juego y dictó pautas en el medio sector, con el apoyo de Arturo Vidal y Xavi Alonso, dueños del «trabajo sucio». El joven volante español se aferró al balón, lo tocó con eficacia, hizo asistencias a goles y, para alegrón del graderío, metió dos pelotas en la cabaña defendida por David Ospina. 

En los primeros 28 minutos, el cuadro bávaro metió al Arsenal en cancha propia, adueñándose de la esférica y el centro del campo. Y ese dominio se tradujo en el minuto 11, con el gol de Arjen Robben. Pero cuando más fuerte estaba el Bayern, llegó el empate inglés en el 30’. Alexis Sánchez cobró un penal, y aunque Neuer detuvo el disparo, el chileno se hizo del rebote y logró marcar. Y así se fueron al descanso, pues en el 35’, el árbitro serbio Mirolad Mazic, no pitó un penal favorable al Bayern, tras una clara mano del lateral derecho Héctor Bellerín.

Pero si el primer tiempo fue casi un monólogo alemán, ya en el complementario hubo dominio total. Los robos de balones eran cómodos, Alaba y Douglas Costa bailaron a su antojo a Bellerín, la estatura de los jugadores alemanes pasó factura, y el toca-toca de Thiago aumentó su ritmo para que llegaran los cuatro restantes goles muniqueses: de Robert Lewandowski, los dos de Thiago y otro de Thomas Müller, quien acabada de entrar a la cancha.

En otro partido de ida en estos octavos de final, el monarca exponente Real Madrid firmó una exitosa remontada para vencer 3-1 al visitante Nápoles italiano, en el estadio Santiago Bernabéu.

Lorenzo Insigne había adelantado a los napolitanos, en el minuto 8. Pero eso enfadó al graderío… y al cuadro anfitrión, que puso el pie en el acelerador y no frenó hasta el pitazo final. Karim Benzema puso la paridad, de cabeza, en el minuto 18. Y del resto se encargaron Toni Kroos y una joya de gol del olante de contención Casemiro, en los minutos 49 y 54, respectivamente.

Además, el Benfica portugués también tributó una sorpresa a sus hinchas, pues venció 1-0 al Borussia Dortmund alemán, con diana de Kostas Mitroglou. Por el cuadro germano, Aubameyang falló un penal.


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José Luis López Sado

Periodista


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