Cuba hacia el clásico de Retadores

Por segunda ocasión en este año, el seleccionado cubano de voleibol, clasificación masculina, batió al de Puerto Rico  (3x0) en la definición de un evento importante. En la primera oportunidad, la victoria en cinco sets permitió a nuestros paisanos acceder al campeonato mundial que organizarán Bulgaria e Italia. Y ahora, en la misma sala pinareña 19 de Noviembre, con el resultado en la Copa Desafío, obtuvo la visa para el Retadores Mundial y destruyó las opciones de los boricuas de asistir al torneo que auspiciará, del 14 al 20 de este mes, la federación portuguesa.

Cubanos y boricuas llegaron con la casilla de las derrotas inmaculadas al encuentro que les podría proporcionar el gran salto. Cara a cara respondieron a las expectativas pronunciadas por los observadores. Las dudas fueron minimizadas por los bandos. El anfitrión inscribió a todos sus jugadores que intervienen en las ligas foráneas. Y no obstante el poco tiempo de ejercitación en casa, exhibieron una cohesión sustancial.

En medio de la brega, los alumnos de Nicolás Vives prevalecían, entre otros rasgos, por la feroz ofensiva, mientras los visitantes acudían a sus recursos defensivos y sorprendente ofensiva para mantener las opciones de sobresalir. En alguna medida, esa conducta frenó el empuje de la escuadra nacional en varios lapsos del cotejo. Y, además, les ofreció un camino para alcanzar la visa para la Liga de las Naciones 2019, encuentro anteriormente nombrado como Liga Mundial.

La exposición de la tricolor en la despedida del Desafío fue bastante convincente y despertó, al mismo tiempo, especulaciones favorables y en contra. Por un lado, recibieron la ovación por el trabajo sobre la net y en la defensa de campo; por otro la censura, por causa de “la inadmisible pereza para cumplir el plan táctico, el exceso de confianza, la falta del ritmo apropiado” cuando tuvieron holgadas ventajas en el pizarrón.

En otras campañas el triunfo del representativo estuvo arropado por una estimable cifra de errores no forzados. En la ciudad Princesa de la Isla Grande del Caribe, la nueva zona de confort de los muchachones estuvo matizada por menos de doce marfiladas por jornada. Los primeros elencos del orbe comenten menos de diez pifias.

NUEVOS AIRES

A partir del 14 los jóvenes voleibolistas asistirán a una seria y también relampagueante prueba, como las sucedida en la más occidental provincia  cubana. En la urbe lusitana encontrarán,  además del cuadro de casa, a dos equipos de Europa, aún por definirse, y los combinados de Kazajistán y Chile.

Tras el cotejo Vives descubrió sus intenciones: “El equipo trabajó bien en esta competencia. El torneo Retadores nos ofrecerá opciones de medirnos en otro escenario importante, porque serán cinco choques de alto nivel. Esa participación nos permitirá llegar en buena forma competitiva a los Juegos Deportivos Centroamericanos y del Caribe de Barranquilla. Tal vez allá juguemos contra los boricuas y de nuevo tendremos que hacerlo bien, pues se trata de un rival cuyos jugadores de la plantilla poseen habilidades técnicas. Ahora no jugaron todos nuestros alumnos. En Colombia los cambios serán más frecuentes, pues todos llegarán con en óptima forma deportiva”.

Las federaciones de Italia y Bulgaria organizan las actividades del mundial en el sector masculino. Y Japón las del femenino. Los europeos recibirán a sus colegas del 10 al 30 de septiembre. Las asiáticas, entre el 29 de septiembre y el 20 de octubre. “Hemos trabajado mucho en la recepción. Debemos aumentar en ese renglón para brillar en esa parte de la campaña", confesó el técnico.

En 2017 el voleibol cubano abrió exitosamente la temporada internacional. Entones Vives y sus discípulos conquistaron el primer escaño del foro mundialista para menores de 21 años; y en el tercer peldaño de la categoría sub 23 años. Ahora el técnico pudiera agrandar esa actuación, pues todavía resta por celebrar la fiesta multideportiva cuatrienal que acogerá la Ciudad de los Brazos Abiertos;  la Copa Panamericana y la justa del orbe.  

Los jovencitos del equipo de voli se ganan la confianza hasta de los analistas del hemisferio occidental. El expasador de la formación cubana en la década de los años 90, y sus asistentes, son los máximos responsables de la trayectoria. Por eso, uno de los puntos para adjudicarse los venideros empeños es desarrollar en los entrenamientos una rutina que propicie a los jugadores aprender a escuchar en medio de alta, media y baja exigencia del juego.