Azul el acento liguero

Todavía carece de una nominación total la Liga Superior de Baloncesto para damas cuya cima ostenta el elenco Capitalinas. A partir del 20 ocurrirá en la sala capitalina Rafael Fonst el tercer desenlace de la apertura del clásico. Y tras esos avatares surgirán los cuatro elencos del adiós correspondiente a la nueva despedida de la justa instaurada en 2010.

Las giraldillas lideran la clasificación general, porque solo declinó en una jornada allá en la sala Rafael Castiello de Guantánamo. En la más oriental provincia cubana las alumnas de Ernesto Wright relegaron a sus similares y acumulan nueve victorias y una derrota. Por ese hacer provocaron un marcado acento azul en el entorno de la competición.

Pero, en el recinto situado en el municipio de Plaza de la Revolución podrían cambiar los hechos. Y surgir rendimientos alarmantes, especialmente por causa del combinado de Sancti Spíritus, pues ese colectivo muestra ahora otro rostro. Su dossier cuantifica siete éxitos y tres fracasos. En la vuelta dos, Marlene Cepeda sufrió una lesión en su hombro, el mismo que le impidió ser la jugadora-centro de siempre en la pasada edición. Las yayaberas terminaron invictas en la primera vuelta del debate y cedieron en tres ocasiones durante la intermedia.

“El equipo se comportó a gran altura, lo importante es clasificar entre los cuatro primeros y, mucho mejor, en tercer lugar, para asegurar una medalla. Las muchachas están en buena forma y mantienen el espíritu de obtener ese objetivo, precisó el director técnico Alexander Álvarez a la prensa local.

Guantánamo, el campeón defensor, está entre la vanguardia de la clasificación general con seis triunfos y cuatro reveses (tercer lugar). Le acompañan muchas expectativas porque, al parecer, han exhibido escasamente sus dotes de guerreras. A propósito, ¿cuánto tiempo demorarán las pinareñas (4V-6D) en recuperar el trono perdido en 2017? ¿Abandonarán la sombra los seleccionados Santiago de Cuba y Camagüey (2V-8D), los de peor historia en este mano a mano. La pugna por la cima del clásico, sospecho, se tornará ahora mucho más angustiosa, pues en ese tipo de ambiente los involucrados solo arrojan la toalla cuando el agobio es irrebatible.

La actual campaña, al decir de los observadores, será una de las más exóticas del baloncesto cubano en los primeros ciclos del cuatrienio. Los Torneos Nacionales de Ascenso se extendieron solamente a una sola vuelta. De nuevo el encuentro anual carecerá de dos importantes jornadas, como son la del Juego de las Estrellas y la Gala de Premiaciones. Mientras ellas queden fuera de la programación de los certámenes nacionales élites, estos solamente tendrán el rango de competencia y no de apoteósica celebración.