Ahora es cuando es en la pelota cubana

Después de un tercio que dijo y no dijo, llegó la hora de la verdad en la temporada cubana de béisbol. Se incorporan los jugadores que estuvieron en la selección nacional y los seis equipos son entonces lo que debieron ser, o lo que soñaron ser, la noche del 18 de octubre cuando tuvo lugar el menos logrado de todos los programas televisivos para solicitar refuerzos hechos hasta ahora.

Algunas estrategias, como la de Industriales de no pedir a Lázaro Blanco o Freddy Asiel Álvarez porque su staff no podía esperar por ellos a riesgo de estar lejos de la zona de clasificación, no se cumplieron. Los Leones no están descolgados, pero tampoco pudieron conservar la mínima diferencia respecto al cuarto lugar. Ahora solo un hombre fortalecerá su rotación de abridores (Bladimir Baños) y otro su bullpen (Andy Rodríguez), mientras su ataque sí será mayor con la entrada de Yordanis Samón y Frederich Cepeda, y a fuerza de batazos deberán buscarse un cupo a la postemporada, pasándole por encima a Las Tunas y a Cienfuegos, ocupantes de los puestos cinco y cuatro, respectivamente. Aunque en dos tercios de campeonato la tabla puede zarandearse bastante, y más en una pelota como la nuestra, más inestable que otras.

Camagüey, que algunos pensamos no iba a aguantar el ritmo con tantas bajas sensibles, se mantuvo flotando en la vanguardia sin su mentor (Borroto), su capitán (Ayala), tres lanzadores (Yariel Rodríguez, Yosimar Cousín y Frank Madan) y uno de sus coach de pitcheo (Pedro Luis Lazo).

Pero el que mejor aprovechó estos 15 juegos iniciales de la segunda fase fue Matanzas. Los Cocodrilos están acostumbrados, excepto el año pasado, a tragar rivales durante la temporada, hasta que después se los tragan a ellos en los play off. En su casa ganaron ocho de nueve juegos y del sexto lugar pasaron al segundo, incluso, compartieron la cima.

Este viernes se oficializaron los nombres de los cinco refuerzos que se quedan, por ahora, en cada equipo. Los que debieron ser si la serie se hubiese detenido durante el tiempo que Cuba estuviera en el Premier 12, a fin de cuentas no fueron tantos días. Tijera a un tercio, de manera excepcional, y nadie se hubiera puesto bravo. Ni siquiera la afición.

De los 30 fichajes, 20 son lanzadores, seis jugadores de cuadro y cuatro jardineros. Ni un cátcher. Con la falta que les hace a algunos jóvenes de esa posición jugar y jugar.

Lamentablemente, el pinareño William Saavedra no podrá jugar en el segundo segmento. Sufrió un accidente en una moto y se hizo una fisura en la muñeca izquierda. Le indicaron un mes de reposo antes de los estudios previos para comenzar a entrenar. La suerte que acompañó a Cienfuegos en la noche de los refuerzos, le dio la espalda ahora: Dachel Duquesne y Saavedra, bajas por lesión. Pero estos Elefantes son guerreros. 

Santiago de Cuba es el que menos va a cambiar. Solo un cambio y con lo bien que le había ido a Abdel Civil, sustituto temporal de Yoelkis Guibert, quien fue de paseo al Premier 12. No solo él, aclaro.

Hoy sábado, cuando Habana cumple 500 años, su equipo de béisbol no estará en los festejos, pues le tocó viajar hasta Las Tunas. Si bien en el enfrentamiento histórico dominan los Azules por 112 a 69, esta temporada el pareo está 3-3, con una subserie para cada uno, y sigue la rivalidad y el morbo entre ambos conjuntos.

Matanzas se irá hasta el Guillermón Moncada donde vivió una amarguísima experiencia durante la etapa preliminar, cuando los santiagueros los barrieron y los mandaron a juegos de comodines. En la primera vuelta ahora, los Cocodrilos les devolvieron el escobazo con un supernocaut incluido, y para más incentivo ambos elencos están abrazados en el segundo lugar del campeonato.

De los 133 choques entre ellos, los indómitos sacan ligera ventaja (70-63) y este año se han caído a barridas. ¿Seguirá ese ritmo? Un dos-uno es lo más previsible.

Por último, los Toros de Camagüey serán recibidos por los Elefantes de Cienfuegos, más urgidos estos últimos de victorias después de caer par de veces en el Latino por la vía de los nueve ceros. Los de Miguel Borroto salieron airosos del ruidoso Guillermón, donde la conga empuja bolas y hace temblar guantes rivales.

Aunque en la serie 59 los actuales líderes del campeonato han triunfado en cinco de los seis choques bilaterales, el balance histórico beneficia a los sureños (78-76), un margen tan estrecho que podría desdibujarse en tres días.

En los dos tercios de torneo que quedan antes de que se juegue una postemporada muenga, con dos partidos de menos en la semifinal, podría suceder mucho, y el que más tiene que ganar y ganar es Industriales si quiere regalarle a su afición un título por los cinco siglos de la urbe, pues anda de colero aunque su estadio esté más reluciente que nunca, con techo nuevo y grama vistosa.

Y aquí les dejo los refuerzos:

Equipo: Santiago de Cuba.

Equipo: Camagüey.

Equipo: Matanzas.

Equipo: Cienfuegos.

Equipo: Las Tunas.

Equipo: Industriales.