Una Fábrica para producir buen arte cubano

Lo que fue un sueño largamente acariciado por su principal impulsor, el reconocido compositor cubano X Alfonso; será a partir de este 13 de febrero una feliz realidad: abrir las puertas de un espacio propio que diera albergue a un “movimiento cultural contemporáneo de vanguardia” como lo calificara el propio X.   

La Fábrica de Arte Cubano (F.A.C.) ya tiene su sede definitiva. Lo que fuera un antiguo almacén se ha trasmutado en amplio y novedoso escenario donde conviven en igualdad de condiciones la música, el cine, la pintura, la fotografía, la moda, la arquitectura, el diseño gráfico y de interiores, la escultura, el video-arte, el teatro y la literatura.   

Situado en la habanera barriada del Vedado, de jueves a domingo será lugar de confluencia para todo aquel que guste del buen arte hecho en Cuba.   

Esta experiencia la probamos durante dos años en Pabexpo y funcionó, comentó X Alfonso a Cubahora, al tiempo que explicó que le debe mucho a la comprensión del Ministerio de Industria que le permitió utilizar este espacio enorme, del que se enamoró prácticamente desde que lo descubrió mientras buscaba locaciones para un video clip.   

La Fábrica tiene cuatro naves, cada una con propósito distinto y con un responsable directo, lo que resultará en muchas cabezas halando en una misma dirección, bromeó.    Será un lugar para escuchar, por sobre todas las cosas, buena música, aseguró Carlos Alfonso, orgulloso papá, creador de la ya legendaria Síntesis y Director Musical del proyecto, quién especificó que habrá tres salas para conciertos, dotadas con un “sonido espectacular”, dos de ellas más íntimas y una, la “nave azul”, para presentaciones de gran formato.   

Como no podía ser de otra manera la inauguración estará a cargo del propio X, quien ofrecerá un concierto acústico, casi íntimo; seguido por Silvio Rodríguez, el 14 en el Patio, donde interpretará canciones de su más reciente disco, Amores.   

Un catálogo de primera línea completa la primera programación de la F.A.C. en esta sede: William Vivanco, Sexto Sentido, David Blanco y Harold López-Nussa.   

Según pudimos observar durante un breve recorrido, quizá lo mejor de la Fábrica es que se aleja de pretensiones, y ofrece un diseño vivaz, prometedor, sin grandes recursos, en el que utilizaron gran parte de los mismos elementos ya existentes en el edificio, como muestra de lo mejor de la creación contemporánea, que hace más con menos, en un acertado ambiente que acoge al visitante y lo introduce en un mundo, donde el arte es el protagonista.   

Para “hacer boca” y servir de impulso a lo que vendrá después, quedará expuesta una selección de la obra de 33 artistas visuales, que incluye nombres reconocidos como Zaida del Río, Ernesto Rancaño, Eduardo Roca, “Choco”; Roberto Diago, Nelson Domínguez  y Eduardo Abela, junto a figuras jóvenes y emergentes de la plástica nacional.   

Siempre estaremos en la disposición de acoger a todo el que se nos acerque, eso sí, haremos un fuerte trabajo de curaduría para garantizar la calidad de las exhibiciones, apuntó X.   

Mientras, en lo audiovisual, el proyecto tratará de abarcar un sector amplio de audiencia.   

Tenemos una sala que va a hacer proyecciones, no sólo de largometrajes, sino de cortos y documentales de tema muy diversos, explicó Inti Herrera, encargado de coordinar el apartado de cine en la Fábrica.     

Agregó que puede coincidir con lo que hay en la red nacional o en la Cinemateca, pero siempre desde una perspectiva propia, al tiempo que adelantó que para las primeras semanas van a colaborar con la Muestra de Jóvenes Realizadores, la cual va a aportar muchos materiales y de los que vamos a programar varios materiales, entre ellos dibujos animados.   

“La idea es tratar de reactivar la necesidad de la gente por ir a la sala oscura, de reavivar ese hábito social que es ir al cine.”   

Una biblioteca con estantes hechos de cajas que ya estaban en el almacén, un laberinto para exponer fotos, escaleras que más que un espacio social recuerdan a las de una industria en explotación todavía, aviones rojos con cuerpos de corazones en el techo de la que será la cafetería, escaleras y escondrijos, estarán entre los principales motivos de sorpresa para el visitante.   

Las puertas de esta especial Fábrica estarán abiertas para todos desde las ocho de la noche hasta las cuatro de la madrugada, y la entrada tendrá una tarifa fija de 50 pesos en moneda nacional para cualquier tipo de evento, ya sea nacional o internacional, aseguró su creador.   

Utópico y soñador confesado, X todavía espera concretar muchas más aspiraciones.   

Queremos que este sea el espacio, la sede de todo tipo de festivales, y que a la vez seamos una institución generadora de iniciativas, adelantó.   

Entre los anhelos están una muy criolla versión del mundialmente conocido Paseo de la Fama, donde en la calle estarán las placas con los nombres de glorias de la cultura cubana que ya no están y en la acera las huellas de las manos de los contemporáneos.   

También está el realizar Factoría Humberto Solás, un espacio para producir cine desde la propia Fábrica; el festival Johann Sebastián Bach y un proyecto que reavive los “planes de la calle que hacíamos cuando éramos niños, queremos contagiar a la comunidad”, dijo.   

Llevamos seis meses trabajando muy fuerte, queremos que esto perdure, que nuestros nietos todavía visiten nuestra Fábrica, deseó, mientras anunciaba la voluntad de repetir la experiencia en “el centro de Cuba y en Santiago”, en una suerte de reproducción feliz de una buena idea.  Y para rendir tributo a esas glorias de la cultura cubana que han sentado pauta en la escena artística y literaria, se inaugurará una calle con placas, entre las que X adelantó algunos nombres, como el bárbaro del ritmo Benny Moré y el pintor vanguardista René Portocarrero.   

La sección cinematográfica se enfoca a la creación de sinergias entre el público y los eventos multidisciplinarios desarrollados al interior del centro cultural. En la búsqueda de un amplio sector de audiencias, la sala de proyección audiovisual abre su diapasón a todo tipo de propuesta fílmica nacional e internacional, abarcando películas de ficción, documentales, cortometrajes y animaciones. En colaboración con la Muestra de Jóvenes Realizadores, se proyectarán materiales de las diversas ediciones del evento y se realizarán talleres de apreciación cinematográfica y sobre diversos elementos al interior del cine y el audiovisual, algunos más especializados, y otros concebidos para la comunidad, en la primera semana de abril. Honrando el deber ser de su propio nombre, los responsables del área cinematográfica en Fábrica de Arte Cubano aspiran igualmente a producir cortos y documentales, “porque el objetivo es también generar arte dentro de nosotros mismos”. Una nómina de 33 artistas participa en la muestra F.A.C. de artes visuales, mixtura de lo más reconocido dentro y fuera del país, con lo más novedoso y transgresor que se asoma desde el prisma de los nuevos creadores. Exposiciones diferentes cada mes conforman este proyecto in crescendo que estará vinculado a la Academia de Artes Plásticas San Alejandro para intercambiar con sus estudiantes y dar a conocer lo más reciente de sus inquietudes artísticas. Acompañan las muestras, talleres y conferencias con los diversos creadores que exhiben sus obras en F.A.C., sobre las tendencias y caminos en el ámbito de la plástica contemporánea nacional e internacional.  

Entre las actividades propuestas para la semana inicial figuran el concierto inaugural de X el jueves 13, para luego continuar con las presentaciones de Silvio Rodríguez el 14, David Blanco el 21, William Vivanco el 22, Sexto Sentido el 28, y el primero de marzo Harold López-Nussa. Una fábrica que involucra músicos, estudiantes, teatristas, bailarines, amas de casa, pintores, taxistas. Hijo de esa “síntesis” de tradición y futuro que ha sido su familia en la cultura musical cubana, sabe que el arte es fibra de un mismo tejido, un conector de personas y realidades. Desde mediados de 2010, la maquinaria ocupa Pabexpo, uno de los centros expositivos más amplios de la ciudad: producción en serie de sensibilidades y empeños.