viernes, 10 de mayo de 2024

Formas de prevenir las enfermedades cardíacas (+Video)

Por suerte hay muchas cosas que se pueden hacer para disminuir las posibilidades de tener enfermedades del corazón…

Alberto Jesús Quirantes Hernández
en Exclusivo 30/08/2021
1 comentarios
Día Mundial Corazón
A todo trance se debe mantener un peso saludable pues tener sobrepeso u obesidad puede incrementar el riesgo de padecer enfermedades cardíacas.

Las enfermedades cardíacas son la principal causa de muerte en muchos países del mundo. También es una causa significativa de incapacidades. Hay muchos elementos que pueden aumentar su riesgo de padecer una enfermedad del corazón y son conocidos como factores de riesgo. Existen varios de ellos que no es posible de controlar, pero hay muchos otros que sí se pueden eliminar. Conocerlos y actuar sobre ellos puede disminuir de manera notable el riesgo de tener una enfermedad del corazón.

Factores de riesgo inmodificables

Uno de ellos es la edad, pues el riesgo de enfermedades del corazón sube a medida que aumentan los años. Los hombres a partir de los 45 años y las mujeres de 55 años o más tienen un mayor riesgo.

En relación al sexo algunos factores de riesgo pueden afectar de manera diferente a las mujeres cuando son comparadas con los hombres. A modo de ejemplo ejemplo, el estrógeno brinda a las mujeres cierta protección contra las enfermedades del corazón. En cuanto a la raza o etnia, determinados grupos tienen mayores riesgos que otros, así como la historia familiar pues existe un mayor riesgo quien tiene un familiar cercano que padeció de una enfermedad cardíaca a una edad temprana.

¿Y los factores de riesgo modificables?

Para todos ellos es posible tomar medidas para prevenir o controlar cambios hacia los estilos de vida saludables que a su vez influiría de manera muy favorables sobre los factores de riesgo supuestamente no modificables. Por suerte hay muchas cosas que se pueden hacer para disminuir las posibilidades de tener enfermedades del corazón.

Ellos son de modo principal el control del peso corporal, de la presión arterial y de la diabetes si la hubiera, mantener cifras normales de colesterol y triglicéridos en la sangre, llevar una alimentación saludable, practicar sistemáticamente ejercicios físicos, no fumar ni ingerir bebidas alcohólicas, controlar el estrés y dormir las horas reglamentarias.

Peso, hipertensión arterial y diabetes

A todo trance se debe mantener un peso saludable pues tener sobrepeso u obesidad puede incrementar el riesgo de padecer enfermedades cardíacas. Y eso se debe a que están vinculados a otros factores de riesgo de enfermedad del corazón, incluyendo elevados niveles de colesterol y triglicéridos, hipertensión arterial y diabetes. Quien controla adecuadamente su peso puede disminuir todos estos riesgos.

Otro de ellos es controlar la presión arterial, pues la presión arterial alta, la llamada hipertensión arterial, es un importante factor de riesgo para las enfermedades del corazón. Es importante que la presión arterial sea revisada sistemáticamente, por lo menos una vez al año para la mayoría de los adultos normales, y más a menudo en quienes tienen un diagnóstico de hipertensión arterial. Por supuesto y siguiendo las orientaciones del médico de asistencia adoptar medidas para prevenir o controlar la hipertensión, incluyendo todos los cambios necesarios en sus estilos de vida.

Los diabéticos duplican su riesgo de enfermedad cardíaca diabética. Esto se debe a que, con el tiempo, la falta de un buen control metabólico provocando un elevado nivel de azúcar en la sangre por la diabetes puede dañar los vasos sanguíneos y los nervios que controlan el corazón y los vasos sanguíneos. Por lo tanto, es importante hacerse la prueba de la diabetes y, si la tiene, mantener la enfermedad bajo estricto control.

Colesterol y triglicéridos

También se deben mantener las cifras de colesterol y triglicéridos sanguíneo bajo control, pues sus elevados niveles pueden obstruir las arterias y aumentar el riesgo de enfermedad coronaria e infarto cardíaco. Cambios imprescindibles en el estilo de vida incluida la alimentación, y los medicamentos de ser considerados necesarios por el médico de asistencia, pueden normalizar las cifras. Los elevados niveles de triglicéridos en la sangre también pueden incrementar el riesgo de enfermedad coronaria, sobre todo en mujeres.

Dieta y ejercicios

La dieta debe ser saludable intentando eliminar o de limitar las grasas saturadas y trans, los alimentos ricos en sodio y azúcares añadidos. La base nutricional debe ser mucha fruta fresca, verduras y granos integrales, así como pescado y carnes magras.

Se deben hacer ejercicios sistemáticamente pues tiene muchos beneficios, fortalece el corazón y mejora la circulación. También puede ayudar a mantener un peso saludable y bajar el colesterol y la presión arterial. Es evidente que todo esto puede reducir el riesgo de enfermedades del corazón.

No fumar ni beber

Si desea cuidar su corazón no debe fumar pues esa adicción eleva su presión arterial y lo pone en mayor riesgo de infarto cardíaco y accidente cerebrovascular. Si no fuma, no comience nunca, pero si usted fuma, dejar de fumar disminuirá paulatinamente su riesgo de sufrir una enfermedad cardíaca. Se puede hablar con el médico de asistencia para buscar ayuda a encontrar la mejor manera de dejar de fumar.

Beber en demasía puede aumentar la presión arterial y sumar calorías adicionales, lo que puede causar ganancia de peso; y ambos factores aumentan el riesgo de enfermedades del corazón. Lo mejor es no beber nada en absoluto en lo referido a las bebidas alcohólicas.

Control del estrés y del sueño

Debe controlarse el estrés pues está relacionado con las enfermedades del corazón de diferentes formas. Una de ellas es aumentar la presión arterial. Pero un estrés extremo puede ser un desencadenante de un infarto cardíaco. Además, algunas maneras comunes de enfrentar al estrés, como comer en demasía, beber mucho alcohol y fumar, son también dañinas para el corazón. Algunas formas de ayudar a controlar su estrés incluyen hacer ejercicio, escuchar música, enfocarse en algo tranquilo o sereno y meditar e incluso buscar ayuda especializada si se considera necesario.

Quien no duerme lo suficiente, incrementa el riesgo de hipertensión, obesidad y diabetes. Y estas tres afecciones, aunque fuesen independientes, cada una pueden aumentar el riesgo de enfermedades del corazón. La mayoría de los adultos necesitan de siete a nueve horas de sueño tranquilo cada noche. Es necesario garantizar tener buenos hábitos de sueño. Quien tiene problemas frecuentes para dormir, debe consultar con un especialista.


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Alberto Jesús Quirantes Hernández

Profesor Consultante y Jefe del Servicio de Endocrinología del Hospital Docente Dr. Salvador Allende en La Habana, Cuba.

Se han publicado 1 comentarios


Ramos
 31/8/21 11:36

Hay que cuidarse no queda otro remedio

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