viernes, 26 de abril de 2024

Un día lejano ya…

La Universidad Central “Marta Abreu” de Las Villas ofrece otra vez sus pupitres a cientos de profesores adscriptos a la cátedra del adulto mayor...

Dorisbel Guillén Cruz en Exclusivo 26/10/2015
1 comentarios

El tiempo, a veces con su rostro saturado de piedad o de nostalgia ha puesto sus ojos en aquellos pies, firmes un día, sobre los anchos pasillos de la universidad más grande de Cuba, justo en el centro de la isla. Antes fueron jóvenes irreverentes que perseguían los saberse en aquella casa grande. Ahora, desperdigados entre otros, como lo fueron ellos, ya no son los mismos. Sus cabezas han sido plateadas por muchas lunas, sus ojos guardan secretos de las ciencias, los hombres y los tiempos viejos. Y aunque discuten sobre matemática quántica con el mismo interés puede que ya no se crean dueños de un descubrimiento ni llamados a un asunto mayor.

Y es que la “Marta Abreu” de Las Villas (UCLV), la CASA, ha visto envejecer a sus primeros habitantes. Sin embargo, para ellos las aulas nunca están cerradas. Aliento de juventud sopla sobre sus días con una iniciativa pedagógica, ya materializada en este país caribeño. A la vuelta de medio siglo y más, cientos de profesores se visten otra vez de estudiantes y acuden a la Cátedra del Adulto Mayor en busca de consejos que le permitan resemantizar el bolero o la última hora de feeling de su primera juventud.

Por ellos, quienes llenan la inexperiencia de interesantes modelos a seguir, se yergue esta iniciativa adscrita al departamento de Ciencias Sociales. Según su presidenta, la psicólogaNadia Leonor Noriega Fundora,“ha encendido una chispita en la UCLV”.

Comenta la especialista que la cátedra está adscripta a la facultad universitaria pero tiene tres instancias que la coauspician: Central de Trabajadores de Cuba, Asociación de Pedagogos de Cuba y la propia UCLV. Para esta fecha el número de graduados asciende a 3974 villaclareños desde el 2001.

HOY REPRESENTO EL PASADO…

“Para mí fue una gran experiencia. Mi idea inicial de este proyecto se constató con lo que me dijeron allí en la cátedra, el primer día. Es una forma diferente de aprendizaje. Nos preparamos para la vida, que aún tiene inmenso caudal”. Afirma el doctor en Ciencias Ovidio Zumaquero Posada, con más de cincuenta años trabajando en la universidad, profesor de Ciencias y postgrados. Después de preparar varias generaciones, este catedrático acercó sus pasos a la jubilación. Cansado del ocio volvió a las aulas y en difícil desentrenamiento de sus rutinas docentes apeló a la cátedra del adulto mayor.

Al decir de Noriega Fundora, la idea redunda en el bienestar y calidad de vida de sus egresados. Aclaró la especialista que no está encaminada a impartir materias sino a dotarlos de una serie de recursos que les permitan afrontar la ancianidad como una hermosa etapa de la vida.

“Hay varias filiares en la provincia. Los sindicatos arrojan resultados positivos, las personas se sienten bien con lo que aportamos. Era un sueño de hace doce años dejar un aula nuestra en la casa matriz y se mantiene hasta hoy con resultados envidiables. Por aquí han pasado doctores en Ciencia y otros de alto rango. Incluso, logramos gestar desde 2012 un aula solamente para jubilados”.

¿OBSTÁCULOS?

“Tenemos que ganar un poco más en la divulgación con adultos y familiares. Los abuelos necesitan usar espacios de tiempo en asuntos de su interés. A través de las secciones sindicales se está tratando de llegar a todos. Una barrera puede ser la movilidad a la universidad y ya buscamos soluciones en el transporte de los adultos para acá”.

Ellos, que estuvieron destinados a sobrevivir al capital —escaso y omnipotente—, a la masificación de la cultura y a la tecnología; jóvenes al fin… no hicieron caso de los imposibles, asumieron épocas de cambio con dulce irreverencia. Otra vez es suya la postura de los sabios.

SI LAS COSAS QUE UNO QUIERE…

“Me explicaron detalladamente de qué se trataba esto y me fue reconfortante además de instructivo. Entendí lo que para muchas de mis compañeras significó acudir a la cátedra.” Dice Zumaquero.

Según un sondeo entre sindicalistas de la academia, cada vez crece el número de aspirantes. Desdeñan cualquier posibilidad de sentarse, en medio de los años. Esos por los que transitan irremediablemente en pie, frente a un aula y a un pizarrón.

“Ya llevo 54 años trabajando en la universidad. Soy jubilado contratado en la carrera de automática y quiero hacer la matrícula este año. Nunca es tarde para aprender. En segundo lugar, nos hace falta un tiempo para las relaciones humanas —afirma el profesor de ingeniería automática: Luís Ramón Martínez Veitía y agrega—: Después de alcanzar un alto grado científico, ser profesor titular hay que pensarlo cuatro veces para sentarse, y más en un aula, como estudiante”. —reflexiona el titular de la Facultad de Eléctrica.

Armarlos de recursos que en las duras condiciones en que vivimos les permitan asumir la vejez de forma plena, más satisfactoria y positiva, este es, según Nadia Leonor Noriega, el propósito fundamental y, hasta el momento, el principal saldo de la cátedra del adulto mayor en la ciudad universitaria de Santa Clara.

También lo considera así Meri Ramírez Fariñas, secretaria del sindicato provincial de educación en este territorio: “Por ser la provincia el sindicato que más graduados aporta a esta cátedra del adulto mayor nosotros entregamos con regularidad diplomas a las nuevas células que se hacen en el municipio. Se han hecho intercambios entre los graduados de estas aulas con otros nuevos integrantes. A la cátedra de la universidad queremos ponerle el nombre de la antigua directora de esta aula en Santa Clara: Sonia Filman, maestra voluntaria que falleció en le mes de junio. Es un reconocimiento a esa persona que también contribuyó con su experiencia a todo el desarrollo de la organización sindical”.

Los alumnos opinan: “Hay una serie de temáticas, el saldo es bueno, los especialistas lo hacen de forma muy amena. El cuerpo profesional de psicología de la universidad ofrece magistrales temáticas del adulto mayor, incluido la sexualidad pero sin relajo. Conferencias sobre drogadicción. Cosas para la vida, porque es imposible tener un amplio espectro de los saberes del mundo.

Para los especialistas del departamento de Ciencias Sociales en la Universidad Central de las Villas, la apertura de la cátedra al adulto mayor resulta un motivo de luz, a la vuelta de quizás de veinte años, cuando ellos los llevaban de la mano por la docencia. Los devenidos estudiantes interpretan el gesto propiamente: “Es un rejuvenecer, sentirse vivo a la tercera edad. Vale la pena”.


Compartir

Dorisbel Guillén Cruz

Periodista

Se han publicado 1 comentarios


Marisol Caraballo Ramos
 2/11/15 22:52

Nadia: Para mí fue una gran experiencia iniciarme como Coordinadora de la Cátedra  del Adulto Mayor en Cifuentes, logrando materializar esta brillante idea,donde logre formar un clasustro de profesores que impartian diferente temas y como resultado logramos que esos adultos se prepararan para la vida, ensenandole  recursos que les permitan afrontar la ancianidad como una hermosa etapa de la vida, con una mayor calidad de vida. Actividad que desarrollaba con amor y entrega pero por circunstancias que nos pone la vida tuve que dejar mis actividades docentes.

Persiste en  tus suenos, no te detengas,vale la pena, quedan muchos caminos que recorrer, lo mas importante no es como ni cuando entramos en la vida de todas esas personas, sino lo que de nosotros le dejamos en el corazon.

Por favor hay palabras sin tildes, y no pongo la ene porque tengo problemas con el teclado, no son faltas de ortografias.

Mis saludos para todos los profe de la facultad de psicplogia en especial para Naida, Vivian, Luis Felipe e Evelin, que se formo como alumna ayudante en la Filial de Cifuentes,

 

 

Deja tu comentario

Condición de protección de datos