Periodismo cubano: el reto de abrazar lo nuevo

En el marco de la Jornada de la Prensa, Cubahora invita a periodistas cubanos a reflexionar sobre los retos que tiene por delante la prensa. Si bien dedicamos un primer acercamiento a fotógrafos cubanos, hoy les damos la palabra a jóvenes periodistas.

Los invitamos a continuar enviando sus reflexiones en el transcurso del día.

Yeneily García García, Jefa de la redacción cultural de la Agencia de Información Nacional

Yeneyli García, a la derecha, durante la cobertura de la Feria Internacional del Libro de La Habana 2015.

“El gran reto del periodismo cubano, o uno de ellos al menos, reside en darnos cuenta que el mundo ha cambiado y con él la manera de contar las historias que lo mueven. No se trata de renunciar a ese periodismo serio del que tanto se habla: ese que utiliza fuentes creíbles, que las cruza, que trata temas relevantes, que está comprometido con su tiempo; sino de saber cómo escribir para llegar a una generación que cada vez lee menos.

“Tenemos que dejar atrás las frases hechas, el lenguaje de trinchera, el didactismo burdo, y ese roce epidérmico a temas que la gente quiere leer. Aunque a veces tratarlos superficialmente es mejor que no tratarlos en absoluto. Uno de los mayores retos: el no subestimar a quien nos lee. No se trata de atender a los reclamos del público ciegamente, pero a veces tenemos que entender que podemos encontrarnos en el medio: ofrecerles lo que queremos que lean, pero de la manera en que ellos quieren leerlo. Lo principal es no tener miedo, y no autocensurarnos, eso ya lo harán otros.

“Y por último, tenemos que entender la gran responsabilidad que tenemos. Quienes lean nuestros periódicos de aquí a 50 años tendrán una imagen muy distorsionada de nuestra realidad. El mejor periodismo en Cuba se está haciendo en la web, y no precisamente desde los medios oficiales, los de más prestigio, que están viviendo de una historia y un legado que no tiene nada que ver con lo que son en estos momentos. Y es una verdadera lástima que sea esta, y no otra, la realidad que llega a los millones de hogares de la Isla.

“El mayor reto está en que el periodismo cubano necesita un cambio de mentalidad, desde sus directivos hasta sus periodistas. Necesita abrazar lo nuevo, dar la espalda a lo mal hecho, a los trabajos escritos a desgana, sin pasión, por encargo.

“La cultura es igual a cualquier otro sector, aunque a veces seamos muy subestimados dentro de un gremio que tiende a medir a sus integrantes por el nivel de complejidad o la extensión de tal o más cual escrito. No todo artículo de tres páginas es leíble, ni toda nota de cuatro párrafos es una gacetilla. Falta profundidad en los juicios, y esa crítica cultural seria, especie en peligro de extinción en nuestra prensa. El mayor reto está en discernir qué merece la pena promover y que no, como llevarlo a los lectores y saber guiar –porque a fin de cuentas escribir sobre algo es validarlo- el gusto de una audiencia que en un tiempo fue una de las más preparadas del mundo”.

Ariel Montenegro, periodista del Sistema Informativo de la Televisión cubana

“La prensa cubana tiene hoy el mismo reto que viene teniendo hace décadas: contar historias que se parezcan al país en que viven sus receptores. Los principales problemas que hacia lo interno presenta el gremio son la inactividad y la abulia causada por años de mecanismos de dirección paralizantes que hacen que muchos profesionales se conviertan en repetidores de comunicados oficiales.

"Debe crearse el marco jurídico propicio para el ejercicio de la profesión, que otorgue deberes a los periodistas y que codifique una conducta ética, pero que también garantice derechos y un ámbito legal de trabajo que permita al profesional tener un escudo con el que defenderse de incomprensiones y tabúes de la subjetividad de una o dos personas que, en ocasiones, pueden quemar un trabajo que está en consonancia con todas las políticas y directrices habidas y por haber”.

José Armando Fernández Salazar, Corresponsal en las Tunas de la Agencia de Información Nacional

“Creo que el periodismo cubano debe acabar de migrar del enfoque utilitario y positivista de otras décadas hacia la era hipermedia y la concepción de esta profesión desde una perspectiva cultural. No basta con informar o movilizar, es necesario construir y presentar desde los medios la cultura de la nación con los recursos expresivos de las nuevas plataformas tecnológicas. De ahí se derivan una infinidad de retos que van desde la superación hasta una mayor cultura de la comunicación en la sociedad y los líderes y decisores”.