martes, 23 de abril de 2024

Los Maceo Grajales, una familia heroica

A Mariana y Marcos Evangelista sus coetáneos siempre los recordaron “consultándose las dificultades, felices en la expansión hogareña, juntos sobre el dolor y la felicidad”...

Pedro Antonio García Fernández en Exclusivo 27/06/2015
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Todavía los historiadores no se ponen de acuerdo sobre la fecha en que Marcos Maceo y Mariana Grajales se conocieron. Una de las primeras biógrafas de ella, Aida Rodríguez Sarabia, afirmaba que había sido en 1842. Varios investigadores santiagueros calculan que pudo haber sido un año después.

Lo único cierto es que en el momento en que se conocieron, Mariana era viuda y con tres hijos de su primer matrimonio: Felipe (1832), Manuel (1836) y Fermín (1838).

En 1831, apenas cumplidos sus 16 años, se había casado con Fructuoso Regueiferos, quien falleció el 5 de julio de 1839, como consta en el Libro 6 de entierros de pardos y morenos, folio 98, número 504, de la Santa Iglesia Metropolitana de Santiago de Cuba.

Durante mucho tiempo la historiografía nacional consideraba a Justo Germán, otro de los hijos de Mariana, como vástago de Regueiferos, ya que el combatiente y médico mambí Eusebio Hernández así lo había asegurado.

Varios biógrafos de la familia heroica, como José Luciano Franco, Nydia Sarabia y Abelardo Padrón aceptaron como cierta esta aseveración dado el prestigio de quien lo afirmaba. Pero la partida de nacimiento de Justo Germán, hallada por el investigador Joel Mourlot, no deja lugar a dudas.

Según el Libro 5, folio 96 de la Iglesia San Nicolás de Morón, este miembro de la familia heroica nació el 28 de mayo de 1843, lo que obviamente le invalida ser hijo de Regueiferos. Aunque investigadores como Joel Mourlot consideran probable de que el padre de Justo sea Marcos Maceo, no hay consenso al respecto.

Sobre Mariana también había inexactitudes en la historiografía. De acuerdo con la edad declarada por sus hijos en el certificado de defunción, acaecida en Kingston, Jamaica (1893), se calculó como su fecha de nacimiento a 1808. Así lo reprodujo José Martí en sus magníficas reseñas para el periódico Patria.

En realidad, nació el 12 de julio de 1815, según partida bautismal localizada en el Libro 9 folio 99 de la parroquia de Santo Tomás Apóstol (Santiago de Cuba) por el colega Joel Mourlot, quien con sus hallazgos provocó una verdadera conmoción en la historiografía nacional.

Con Marcos Maceo sucedió algo similar. A partir de testimonios orales, reproducidos por Eusebio Hernández, durante mucho tiempo se aceptó la hipótesis de su origen venezolano, aunque nunca se halló documento que lo fundamentara.

En el Libro 8 de pardos, folio 144, de la parroquia Santo Tomás Apóstol, la historiadora Olga Portuondo encontró una partida bautismal que consigna su nacimiento en Santiago de Cuba, el 25 de abril de 1808.

Además, así mismo lo consigna su expediente del ejército español (en el que permaneció de 1826 a 1837), localizado en el Archivo Histórico Militar de la nación ibérica.

Un matrimonio ejemplar

Comete el mayor de los dislates quien pretenda abordar la personalidad de Mariana y su influencia en la familia, sin tomar en cuenta a Marcos. A la vez, en el patriarca de los Maceo Grajales se evidencia la impronta de la madre heroica.

A Mariana sus coetáneos la describían, antes del 68, “robusta, más bien de baja estatura, nerviosa, de movimientos ligeros”. En la atención de los cultivos ayudaba a la familia, sin descuidar la vivienda, siempre ordenada y limpia.

En el aspecto personal, vestía –y vestía a los hijos–, con la mayor pulcritud. Era tierna y bondadosa; y a la vez, inflexible en la disciplina.

De Marcos Evangelista Maceo se cuenta de que tenía fama de honrado a toda prueba y un gran ascendiente entre los campesinos de la zona. Era de maneras reposadas, poco hablar y trato fino, envuelto en carne.

En su expediente del ejército español se le describe de cinco pies seis pulgadas, pelo, cejas y ojos negros, tez de color parda, nariz grande, boca regular, con una cicatriz pequeña en la frente. 

A fuerza de sudor y machete, Marcos y Mariana ampliaron la pequeña estancia, de unas cuatro hectáreas, hasta expandirse con la hacienda aledaña, de cuatro caballerías, adquirida entre febrero y agosto de 1852.

Toda la prole (los hijos propios y los del primer matrimonio de Mariana, a quienes Marcos crió como suyos) participaba en las labores agrícolas. El Maceo mayor los educaba en el trabajo diario; como experto esgrimista y tirador, les enseñó el uso del machete y las armas de fuego, la doma y monta de caballos.

Cuentan que al atardecer, después de las comidas, una hija leía en voz alta los libros que Marcos encargaba en Santiago: novelas de Alejandro Dumas, biografías de héroes como Bolívar y Louvertoure, la Historia de los girondinos, de Lamartine, que los impregnaba de ideales de libertad, igualdad, fraternidad.

A los ojos de los hijos, Mariana siempre fue la compañera del padre. Con ella analizaba todos los problemas y ambos tomaban de mutuo acuerdo las decisiones. Siempre los recordarían “consultándose las dificultades, felices en la expansión hogareña, juntos sobre el dolor y la felicidad”.

Al igual que Justo Germán, Antonio de la Caridad, el futuro Titán (1845), María Baldomera (1847), José Marcelino (1849) y Rafael Cholón (1850), aparecen en sus partidas bautismales como hijos naturales de Mariana, sin que se consigne el nombre del padre, aunque Marcos Evangelista socialmente los reconoció como hijos.

En 1851, Mariana y él legalizaron su unión; al año siguiente, nació Miguel, a quien en su partida bautismal ya se le reconoce como hijo de ambos. Luego nacieron Julio (1854), Dominga (1857), Tomás (1858), Marquitos (1860) y María Dolores (solo vivió del 22 de julio al 3 de diciembre de 1860).

Excepto esta última y Manuel Regueiferos Grajales, fallecido en 1854, todos los Maceo-Grajales se incorporaron a la manigua, al llamado de la Patria. Pero para hablar de la trayectoria revolucionaria de la familia en las guerras de independencia se requeriría, como mínimo, otro artículo de la extensión de este.


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Pedro Antonio García Fernández

Periodista apasionado por la investigación histórica, abierto al debate de los comentaristas.

Se han publicado 1 comentarios


china
 15/11/16 11:33

buenas muy buen reportaje, me gustaria buscar mas informacion del desempeño que tuvo cada miembro de la familia maceo-grajales en la lucha independentista. mi niño de 10 años necesita realizar un trabajo  sobre las familas destacadas en cuba y esta familia es la mas ideal para que el exponga su trabajo.

me gustaria que pudiera ayudarme

saludos

 

 

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