viernes, 19 de abril de 2024

El Partido de la unidad

Al adoptar el nombre de Comunista en 1965, Fidel afirmó que se estaba pensando en la organización política que se requería entonces y en la que se requeriría en el futuro

Pedro Antonio García Fernández en Exclusivo 04/10/2015
0 comentarios

El actual Partido Comunista de Cuba es el fruto legítimo de la Revolución. Surgió de la fusión de las tres principales organizaciones que llevaron el peso de la lucha contra la tiranía batistiana: el Movimiento 26 de Julio, el Partido Socialista Popular y el Directorio Revolucionario 13 de Marzo.

Se tomó como su fecha fundacional el 16 de abril de 1961, cuando Fidel proclamó el carácter socialista de la Revolución. Hasta ese momento, había contactos casi diarios entre esas organizaciones para consultarse cuestiones fundamentales y todas aceptaban incondicionalmente el liderato del Comandante en Jefe.

Pero, era necesario pasar a una nueva fase de la unidad de todos los revolucionarios cubanos por lo que dichas organizaciones acordaron autodisolverse y fusionarse en las Organizaciones Revolucionarias Integradas (ORI).

Lamentablemente, ciertos errores y posiciones sectarias comenzaron a afectar el desenvolvimiento de las ORI. Fidel supo atajarlos a tiempo y su crítica oportuna les puso fin. Los mecanismos creados para erradicarlos introdujeron una práctica novedosa en la construcción de los partidos políticos.

Las ORI dieron paso al Partido Unido de la Revolución Socialista de Cuba (PURSC), en el cual se establecieron tres principios de ingreso: la voluntariedad, el criterio de las masas y la selección. No se exigía militancia anterior alguna, ni importaba la organización de procedencia.

Solo se excluyeron del PURSC a quienes habían estado vinculados a la tiranía de cualquier forma o votado en las elecciones de 1958, en las que el movimiento revolucionario orientó no participar.

El 3 de octubre de 1965, en un acto celebrado en el entonces teatro Chaplin (hoy Karl Marx), se adoptó el nombre de Comunista. Como expresara Fidel “es necesario que el nombre de nuestro Partido diga no lo que fuimos ayer, sino lo que somos hoy y lo que seremos mañana”.

El líder histórico de la Revolución anunció en ese acto la constitución del primer Comité Central y los miembros que lo integraban.

Al respecto afirmaría: “No hay episodio heroico en la historia de nuestra patria en los últimos años que no esté ahí representado; no hay sacrificio, no hay combate, no hay proeza —lo mismo militar que civil— heroica o creadora que no esté representada; no hay sector revolucionario, social, que no esté representado”.

Durante su intervención, Fidel aludió “a una ausencia en nuestro Comité Central de quien posee todos los méritos y todas las virtudes necesarias en el grado más alto para pertenecer a él”. Y dio a conocer la carta de despedida del Che, quien marchaba a otras tierras a cumplir con su deber de internacionalista.

También durante aquella actividad se informó de la creación del matutino Granma, a partir de la fusión de los diarios Revolución y Hoy, inicialmente órganos del Movimiento 26 de Julio y del Partido Socialista Popular, respectivamente, ,

EL PARTIDO HOY

A partir de 1965, el actual Partido Comunista de Cuba,como legítima fuerza dirigente superior de la sociedad, devino instrumento político idóneo para garantizar la continuidad histórica de la Revolución y la construcción del socialismo, objetivos primordiales de todo el pueblo cubano.

En 1975, celebró su Primer Congreso, que culminaba su proceso de organización al aprobar los documentos que regirían su vida interna (Estatutos) y orientarían la actividad partidista en todos los planos de la vida social (Plataforma Programática, Tesis y Resoluciones).

El Congreso analizó cómo llevar a cabo el proceso de institucionalización del país, para lo cual se aprobó la celebración de un referéndum sobre la Constitución Socialista, cuyo articulado ya antes la población había debatido en sus lugares de residencia y centros de estudios y de trabajo.

Reafirmó además la línea de masas y la selección como los elementos rectores en el crecimiento del Partido.

Los siguientes congresos centraron sus debates en aspectos determinados por la situación nacional e internacional existentes. Por ejemplo, el Segundo (1980) abordó con énfasis la defensa del país y el desarrollo económico; el Tercero, el proceso de rectificación de errores.

Entre 1989 y 1991, con el derrumbamiento del llamado socialismo real en Europa del Este y la desintegración de la URSS, Cuba perdió de golpe el 86 % de su capacidad de compra y su PIB se redujo drásticamente. Por ello, el Cuarto Congreso (1991) debatió cómo enfrentar el llamado periodo especial en tiempo de paz.

Para derrocar a la Revolución Cubana, Estados Unidos recrudeció el bloqueo con el que desde 1962 agredía económicamente a la Isla: en 1992 fue promulgada la Ley Torricelli, luego reforzó aún más el bloqueo con la Helms-Burton (1996).

De ahí que el Quinto Congreso (1997) llamara a fortalecer la unidad del pueblo para enfrentar sin vacilaciones el feroz recrudecimiento de la guerra económica, la subversión ideológica y las presiones y amenazas de todo tipo de los imperialistas yankis.

Catorce años después de esta magna cita se celebró el VI Congreso. Entre las causas de tal aplazamiento estuvieron las urgentes estrategias de enfrentamiento a las coyunturas económicas negativas de la década del 2000 y las consecuencias que en el plano nacional dejó el Período Especial. A esto se sumó la gravedad del estado de salud de Fidel en el 2005.

Esta magna cita concentró sus debates en la solución de los problemas de la economía y las decisiones fundamentales de la actualización del modelo económico cubano y en la adopción de los Lineamientos de la Política Económica y Social del Partido y la Revolución.

El VII Congreso iniciará sus sesiones el 16 de abril de 2016, el día en que se conmemorará la proclamación del carácter socialista de la Revolución en su aniversario 50.

En el magno evento se evaluará el cumplimiento de los acuerdos del VI Congreso y la 1ª Conferencia Nacional del Partido, y se precisará el camino para seguir perfeccionando nuestro modelo económico-social. También se analizará el perfeccionamiento de la División Político Administrativa del país.

Entre otros temas a debatir estarán la generalización del nuevo modelo de funcionamiento de los Órganos Locales del Poder Popular; así como el proceso eleccionario, que incluye la puesta en vigor de una nueva Ley Electoral y la posterior realización de las elecciones generales.

De este modo, el actual Partido Comunista de Cuba, surgido en el crisol de la unidad revolucionaria forjada durante la lucha, continúa la idea martiana de fundar una República con todos y para el bien de todos, donde la ley primera sea el culto de los cubanos a la dignidad plena del hombre.


Compartir

Pedro Antonio García Fernández

Periodista apasionado por la investigación histórica, abierto al debate de los comentaristas.


Deja tu comentario

Condición de protección de datos