El tiempo, bien aprovechado, nunca transcurre en vano. Y la esfera del deporte, jamás ha sido –ni será- la excepción. Si no, «pregúntesele» al director técnico italiano Lorenzo Mambrini, quien desde hace varias temporadas conduce las riendas del equipo de Santiago de Cuba en los torneos nacionales de fútbol.
Después de algunos años de trabajo bajo el inclemente sol que cae sobre las canchas indómitas, pienso que ya le ha llegado su momento al adiestrador y sus discípulos, de cara a escalar al podio de premiaciones en la actual 102 Liga Cubana de Fútbol.
Literalmente, Santiago de Cuba paseó la distancia en la primera vuelta preliminar del grupo C, que se disputó en la cancha del estadio cienfueguero Luis Pérez Lozano. Con muchos jugadores que repiten de años anteriores –en la mayoría de los restantes equipos, no ocurre así-, los llamados «Diablos Rojos» devinieron mejor equipo, no solo de su llave, sino también de todo el certamen.
Vale citar que, en seis partidos, los santiagueros obtuvieron cuatro triunfos y dos empates, para 14 puntos, con una perfecta cota de diez goles a favor y ninguno en contra. De esas diez dianas, tres han sido obra del delantero Ramón Pablo Labrada, quien se ubicó a una perforación del líder del grupo, el pinero Yoandir Puga.
Pero hay más. Si Labrada se lleva las palmas en sus funciones ofensivas, el arquero Nelson Johnston ha sido puntal del triunfo de los «Diablos Rojos» indómitos, pues no ha permitido goles en 540 minutos de juego. Les recuerdo que este joven es el cancerbero regular de la selección nacional de fútbol-sala.
HABANA, LA GRAN DECEPCIÓN
Sin lugar a dudas, y dada la excelente nómina que posee, la gran decepción de estas seis primeras fechas ha sido La Habana, tercer lugar en las cuatro últimas temporadas.
Los capitalinos enrolan sobre el gramado, entre otros, a tres jugadores que consiguieron la medalla de bronce en los Juegos Centroamericanos de Veracruz, México, en 2014. Son ellos los talentosos volantes Daniel Luis Sáez, Yolexis Collado y Andy Baquero.
El trámite de los habaneros ha sido sumamente pálido, pues ocupan la zaga, con unos dígitos para el olvido: par de empates y cuatro derrotas, con una pobre cota de dos puntos, un solo gol anotado –del internacional Baquero- y 13 en contra.
Los jóvenes colectivos de Cienfuegos e Isla de la Juventud, restantes miembros del grupo C, marchan igualados con ocho puntos, tras dos victorias e igual cantidad de igualadas y derrotas.
Vale recordar que Villa Clara y Ciego de Ávila lideraron los respectivos grupos A y B, con 11 y 10 puntos, respectivamente.
La segunda vuelta eliminatoria se iniciará el próximo 6 de abril, para los tres apartados, bajo el mismo sistema competitivo de seis partidos. Los dos mejores equipos de cada una de esas llaves, con refuerzos de los seis que no avanzaron, se incluirán en la final del torneo en busca del título que posee Villa Clara.
Ahora, Cubahora los deja con los dígitos que dejaron las acciones en los tres grupos:
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