jueves, 25 de abril de 2024

Falleció Senén Suárez, el máximo compositor de la Sonora Matancera

El destacado músico fue un instrumentista que dejó su huella en el tres y la guitarra...

Rafael Lam Marimón en Exclusivo 07/10/2013
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Senén Suárez
El maestro cuenta con cientos de artículos de música cubana, en el portal de Cubarte.

Senén Suárez, considerado en muchos países de América Latina como una gloria de Cuba, falleció a las 8 y 30 pm del domingo 6. El músico había nacido el 30 de julio de 1922 en el pueblito de Manguito, provincia de Matanzas. Casualmente fue el compositor más grabado por el conjunto La Sonora Matancera.

Algunas de sus composiciones cantadas o interpretadas por legendarias agrupaciones son: "La sopita en botella", "La esquina del movimiento", "Reina Rumba", "Ahí na má", "El Barracón", "El son de la medianoche", "Eres sensacional", "Guasabeando el rock and roll", "Ay mareo", "Mi falso querer", "Nobleza", "Dale Pepe", "Por ahí viene la bola", "Pregones de San Cristóbal", "Tumba para tumba y bongó", "Sapo Piloto", "Yo traigo la última", "Una equivocación", "Dale Pepe".

Entre las voces y agrupaciones famosas que cantaron las canciones de Senén sobresalieron: Benny Moré, Nelson Pinedo, Celia Cruz, Fernando Álvarez, Bienvenido Granda, La Sonora Matancera, Orlando Guerra “Cascarita”, Los Guaracheros de Oriente con Ñico Saquito, Conjunto de Ernesto Grenet, Conjunto de Luisito Pla, Conjunto Colonial de Nelo Sosa, Adriano Rodríguez Tata Güines, Dan Den, Grupo de Senén Suárez con Portillo Scull y Laíto como cantantes.

Senén fue un instrumentista que dejó su huella, estudió el tres y la guitarra, después de mucho esfuerzo personal. En tiempos de modernidad, en la década de 1960, asumió con su combo la debatida guitarra eléctrica.

Desde su llegada en 1940 a La Habana, pasó por muchos avatares. Eran tiempos difíciles, pero tenía la voluntad de los músicos auténticos que lo daban todo por sus ideas. Comenzó con Luisito Plá y sus guaracheros; siguió con el conjunto de Gales, fundó el conjunto Colonial con Nelo Sosa, con Orlando Vallejo y fue miembro de Los Guaracheros de Ñico Saquito.

Su gran momento comienza con el conjunto de Ernesto Grenet en el cabaret Tropicana donde se mantuvo desde 1948 hasta 1958. Cuando Grenet se retira, Senén asumió el conjunto para los bailables de Tropicana. En la voz lo acompañaba casi siempre Estanislao Sureda “Laíto”.

“La experiencia en Tropicana es increíble, imagínate que se trata del cabaret más famoso de América y uno de los grandes del mundo; por ahí desfilaron los grandes todos: Nat King Cole, Carmen Miranda, Los Chavales de España, Chano Pozo, el Ballet de Montecarlo, Bola de Nieve, Benny Moré y compañías artísticas hasta de China”, dijo una vez.

Después de Tropicana, en 1959 se monta en el tren de la nueva música, la electrónica con su combo donde hace versiones y originales instrumentales con otra visión. En esta experiencia lo acompaña Gerardo Portillo Scull quien colocó en el Capri un tema muy famoso en la década de 1960: Canta lo sentimental, de Gómez y Montiel.

Esta tristeza se niega al olvido

Como la penumbra a la luz

Quiera el destino que puedas volver

Un  día para recordar.

“Hay una historia del combo en el cabaret La Red, donde el amor se queda aprisionado, en L y 19, donde acompañábamos a la cantante La Lupe, la Reina del Sentimiento latino; pero esa es una historia para contarla en un libro”, aseguró Senén.

También hay otro momento digno de recordar: La delegación artística de la Expo 67, en Montreal, donde causó sensación con su combo al interpretar la Guajira Guantanamera, de moda en ese momento por la versión grabada de Peter Seeger.

“En la expo viajamos con el famoso helado Coppelia, que se había estrenado un año antes –me contaba Senén-. Sacamos los instrumentos musicales fuera del pabellón cubano. Causamos sensación y pusimos el nombre de Cuba en la prensa.  Nos mantuvimos un año y 6 meses poniendo sabor en aquellas frías noches.”

La saga de Senén por tierras nicaragüenses, por África en plena guerra, por la Unión Soviética y América Latina, merece todo un libro. Pero Senén también fue investigador de los buenos. Deja un  libro llamado Las raíces del son, un estudio de la música nacida en la zona oriental y redimensionada en La Habana por el Septeto Habanero. También el maestro escribió cientos de artículos de música cubana, en el portal Cubarte.


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Rafael Lam Marimón


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