El cumplesueños de Fidel

“Lleva ropa cómoda, gorra y tenis, que vamos a recorrer varios lugares y a pleno sol. Hoy vas a vivir un cumplesueños”. Así me llegó la invitación inicial para este 13 de agosto, en que celebraríamos, en una comunidad de Caracas, el cumpleaños 88 del líder de la Revolución Cubana, Fidel Castro Ruz.

Confieso que inicialmente pensé en música, globos, colores, actividades culturales, deportivas y recreativas diversas y hasta en alguna que otra “torta”, como le dicen por acá a los habituales cakes cubanos; pero nunca imaginé que viviría una tarde realmente especial, diferente, llena de sorpresas y satisfacciones, donde el protagonista principal fuera el propio pueblo venezolano.

Llegué poco después del mediodía a la urbanización socialista La Paz, del Distrito Capital de Caracas, para encontrarme un mar de personas de todas las edades realizando las más disímiles acciones, en un ambiente de fiesta y solidaridad de increíbles proporciones.

MÁS QUE UNA URBANIZACIÓN… AIRES DE VIDA

Interesada por las características de este lugar, supe que esta urbanización, perteneciente a la Oficina de Planes y Proyectos Especiales del Gobierno del Distrito Capital, fue fundada el 6 de diciembre de 2012 y la conforman unas 930 familias provenientes de 17 refugios, estimándose una población total de más de 5 000 habitantes, entre ellos más de un millar de niños.

Está conformada por unas 10 torres en las que se reúnen 146 apartamentos, además de tres panaderías, una cancha deportiva y 6 espacios concebidos como parte de una Base de Misiones, donde confluyen y laboran de forma permanente colaboradores cubanos de salud, cultura, deporte, educación, entre otros. A ellos se une también toda una organización comunitaria integrada por comités multifamiliares de gestión, mesas de trabajo para estas y otras áreas, como la de Infraestructura, Alimentación y Seguridad —voceros de la propia comunidad— y una mesa de planificación que todos los lunes analiza los problemas propios de la urbanización.

Sin embargo, esta continuaba siendo una comunidad en la que se respiraba temor a hechos delictivos comunes, a la convivencia no pacífica, a la vida sana de niños y jóvenes en sus calles y parques y a la confluencia de muchas personas en lugares públicos. Pero el accionar directo de los misioneros cubanos y la unión de voluntades demostró entonces que sí se puede respirar alegría, ambiente libre y limpio, intercambio entre sus habitantes y construcción de nuevas y mejores formas de vida.

Durante la semana que concluye, y especialmente este 13 de agosto, 25 grupos de trabajo, integrados por miembros de la Misión Salud, junto a la Deportiva, la Educativa, Cultura Corazón Adentro y el Frente Francisco de Miranda, se unieron como un gran sistema de misiones sociales para abordar casa por casa y brindar servicios de oftalmología, optometría y óptica, odontología, medicina interna, traumatología, ginecología, citología, angiología, genética clínica, medicina general, fisiatría y cirugía general.

Mientras, los compañeros de la Misión Dr José Gregorio Hernández ofrecían atención especializada a personas con discapacidad, y el Programa para el Buen Vivir del paciente diabético, con su grupo de promotores, montó un stand sobre el uso y beneficio del Heber Prot P.

La Misión Cultura desarrolló acciones como pintacaritas, bailoterapia, juegos participativos, adivinanzas, trabajos de manualidades, exposiciones, eventos de música, teatro, artes plásticas, danza y literatura, juegos escénicos; a la vez que actuaba el conocido Circo del Sur y la Colmenita de Caracas.

Como es ya cotidiano, Barrio Adentro Deportivo realizó actividades que contribuyeran a una cultura de paz y un estilo de vida saludable, a partir de las propias necesidades deportivas de la urbanización. Así se realizaron juegos tradicionales como el trompo, la perinola, la tracción de la soga, el futbolito, voleibol, béisbol, kikimbol, boxeo; y otros pasivos como el parchís, el dominó, la dama y el rompecabezas; además de las tablas gimnasticas de adultos mayores y la presencia de la ciclo vía, una de las acciones de mayor acogida por los niños y jóvenes.

Por su parte, la Misión Educativa evaluó las necesidades educativas de la Comunidad, inauguró nuevas aulas para la Misión Robinson. La Misión Vivienda revitalizó contenes y acercas, la Energética realizó inspecciones al alumbrado público, impartió charlas educativas de uso eficiente de la energía y sustituyó bombillos incandescentes por ahorradores.

La Misión Alimentación y la Red Mercal también están ya presentes en esta comunidad: Decorados con pendones y banderolas, los nuevos espacios de salud, parques bio-saludables y canchas deportivas, además de un mural realizado por colaboradores de Cultura en el que quedó impregnado para siempre el andar histórico por los pensamientos de Bolívar, Martí, Fidel y Chávez.

DEL CUMPLEAÑOS AL CUMPLESUEÑOS: UN PUNTO DE PARTIDA

“En días como estos, no puede faltar la música, las declamaciones, el agradecimiento eterno al líder cubano y a nuestro Chávez”, decía una de las coordinadoras del Consejo Comunal de la Paz. Por eso, a la fiesta de pueblo se unieron también dirigentes del Gobierno del Distrito Capital, ministros del Poder Popular venezolano para los pueblos indígenas, la Cultura, la Salud, la Mujer y la Fundación Oro Negro, así como Ernesto Villegas, ministro de Estado para la para la Transformación Revolucionaria de la Gran Caracas.

Allí recordaron a Fidel, compartieron con los misioneros cubanos y con el pueblo, hablaron de la inigualable amistad entre Chávez y Cuba, entre nuestros dos pueblos; dando colofón a una jornada en la que se unieron el tradicional son cubano, interpretado por jóvenes músicos de la isla, con el joropo venezolano, fielmente bailado por diez parejas de colaboradores cubanos de la Misión Cultura que hicieron vibrar de emoción a todos los que acudieron a la actividad central de cierre.

Muchas historias quedaron en las calles de esta urbanización de Caracas por estos días. Manos amigas se unieron para ofrecer bienestar y felicidad a sus pobladores; no solo convirtiéndolos en protagonistas de la celebración, sino en beneficiarios permanentes de las Misiones Sociales cubanas en Venezuela y de los esfuerzos que realiza el gobierno bolivariano por mejorar las condiciones y la calidad de vida de su pueblo.

De esta manera, nuestros misioneros van ocupando también otras comunidades necesitadas a lo largo de todo el país, llevando en sus mochilas, su pensamiento y su acción las enseñanzas y el deseo eterno de nuestros comandantes.

Recorriendo y viviendo momentos como estos comprendí que cada día de acción es apenas un punto de partida en el afán por la vida. Mientras en otras partes del mundo las guerras y los anhelos se destruyen a diario, hay gobiernos y pueblos que construyen y creen en un futuro mejor para todos. Para ellos, no importa el sol, el cansancio, el desvelo, porque la mejor celebración que podían ofrecer al aniversario 88 del líder cubano era, como dijera un colega por acá, más que un cumpleaños, un cumplesueños.