Cuba en el punto cero del planeta

Mucho antes de que el XVIII Festival Mundial de la Juventud y los Estudiantes corriera sus cortinas, el encuentro palpitó en cada corazón cubano, y es que activa ha sido siempre la participación en los Festivales de la Mayor de las Antillas, desde que en 1978 se convirtió en el primer país de América Latina y del Tercer Mundo en ser sede de esta importante cita.

La delegación cubana, que llega ahora al punto cero del planeta, no solo levantará la bandera de sus causas, sino también abogará por la solidaridad y por las principales demandas del planeta, expresó a Cubahora Sucelys Morfa González, segunda secretaria del Comité Nacional de la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC).

—¿Qué temas incluye la agenda de debate?

—La UJC, con sus organizaciones estudiantiles y movimientos juveniles, reflexionará sobre la necesidad de seguir logrando la integración de América Latina y el Caribe como una alternativa viable, y como el mayor aporte de nuestros pueblos a ese mundo mejor que la humanidad urge.

“Exigiremos un mundo de paz y transformaciones sociales, sin la injerencia del imperialismo. Denunciaremos las políticas neoliberales y los intentos de convertir en negocio la educación pública, gratuita y de calidad que hoy requieren los pueblos. También condenaremos el terrorismo, el cese de la impunidad y el castigo para monstruos como Luis Posada Carriles.

”Encarnarán el sentimiento nacional, la justicia para los Cinco antiterroristas condenados en Estados Unidos, el cese total e incondicional del bloqueo genocida impuesto por ese país, así como el cierre y la devolución del territorio que ocupa desde hace más de un siglo la ilegal base naval yanqui en Guantánamo.

”El Tribunal Antiimperialista, pieza clave del programa político de los festivales mundiales, no estará ausente con las demandas por las angustias del pueblo de Palestina y el Sahara Occidental, y reivindicaciones históricas como la independencia de Puerto Rico y la soberanía argentina sobre las Malvinas.

”Compartiremos experiencias y aportes en materia de cooperación, en esferas como la salud y la educación, como ejemplos concretos de solidaridad e internacionalismo a favor de los jóvenes y de todos los seres humanos”.

—¿Cuál es la composición de la delegación cubana a Ecuador?

—Amplia y representativa es nuestra delegación, como también fue el proceso para elegir a sus integrantes desde la base misma, en cada colectivo de trabajo y estudio. La trayectoria dentro de la organización juvenil y en los diferentes puestos de trabajo, así como el impacto político, económico y social de los colectivos, conforman el aval de quienes viajan a Ecuador.

“Son 200 jóvenes los que integran nuestra delegación, de ellos 30 elegidos de manera directa. Las estadísticas sitúan en 28 años el promedio de edad de los miembros de esta representación, entre los cuales, los obreros llevan la voz cantante (37 en total), en tanto los estudiantes universitarios y del nivel medio superior de enseñanza constituyen la segunda fuerza.

”En ella existen las más variadas ocupaciones y esferas de importancia de hoy en el país. Se destacan campesinos, combatientes, dirigentes juveniles, juristas, científicos, deportistas, médicos y enfermeros, educadores, ingenieros, trabajadores bancarios, cuentapropistas, artistas…”.

APORTE CUBANO A LOS FESTIVALES

Aun cuando Cuba no pudo asistir al I Festival Mundial de la Juventud y los Estudiantes —realizado en 1947, en Praga, capital de la República Socialista de Checoslovaquia—, siempre ha aportado al desarrollo exitoso de los mismos como muestra de nuestro respaldo al mayor evento de la juventud progresista y antimperialista del orbe.

Fue a partir del segundo —celebrado dos años después en Budapest, República Popular de Hungría— que nuestro país asistió con cuatro miembros de la Juventud Socialista. Desde entonces, el movimiento juvenil cubano ha mantenido su tradición histórica de contribución en tales encuentros, que han sido un espacio de solidaridad con Cuba, de apoyo a nuestra Revolución, de condena al bloqueo, y en los últimos años, de reclamo de la libertad de los Cinco Héroes.

También tuvo el privilegio de organizador dos festivales, el XI, que fue el primero que se realizó fuera del continente europeo, y el XIV, donde la propuesta de realizarlo, hecha por Fidel, favoreció al rescate del movimiento de los Festivales después de la caída del campo socialista.

El prestigio alcanzado por Cuba en el ámbito internacional es un importante factor movilizador, vital para el triunfo de estas citas, donde nuestra presencia interviene en la búsqueda de consensos y toma de decisiones sobre los principales temas que interesan a la juventud del mundo.

También la isla antillana ha sido exponte de la solidaridad internacional y ello se evidencia en la exigencia de justicia durante la guerra de Vietnam, en contra del apartheid, en apoyo a la causa Palestina y por el derecho a la autodeterminación del pueblo Saharaui.

Como apuntó la segunda secretaria de la UJC, la de ahora también será una oportunidad para el intercambio y otra expresión de que los sueños y las luchas conectan a diversas generaciones a favor de los destinos de la patria y del mundo. “No olvidemos que los festivales han sido siempre una gran fiesta de la juventud, los estudiantes y de todo el pueblo cubano”.