Un nombre para aprendérselo

No es fácil. Y tampoco tan difícil. Pero es un nombre que debemos aprendernos: Milaymis de la Caridad Marín Potrillé. Nos lo había aconsejado ya una vez con un desempeño espectacular. Y lo recordó hace unas pocas horas, este jueves, cuando se convirtió en la primera luchadora cubana campeona mundial juvenil. La muchacha viene arrollando.

Ese nombre para aprenderse salió a la luz cuando ganó también la corona en en los terceros Juegos Olímpicos de la Juventud, celebrados en octubre de 2018 en Buenos Aires.

Lo de este jueves en Tallinn (en estonio: Tallinn) va a dar ahora y después mucha tela por donde cortar en muchos puntos del planeta. Y en casa poner todavía más candente la lucha por ser la número uno en su división. De esos escribiremos después…

El miércoles, en la cuarta jornada del certamen, se impuso en sus cuatro combates, en la categoría máxima de los 76 kilogramos, que incluyeron desde la fase clasificatoria hasta la de semifinales.

¿Quiénes fueron, según leímos en el sitio digital Jit, sus cuatro primeras víctimas? En el debut: la japonesa Yasuha Matsuyuki (por cómoda pizarra de 5-1, una tónica que mantuvo en el resto de sus combates). Octavos de final: la india Karuna Karuna (6-0). Cuartos de final: la uzbeka Mukhlisa Normuminova (6-2). Semifinales: la china Qian Jiang (4-0).

¿Sumamos los puntos a favor y en contra en esos cuatro combates? La adición nos dio números demoledores: 21 y 3.

Le faltaba entonces una pelea, este jueves, para llegar al punto más alto del podio. Y a ello aspiraba también con mucha fuerza la taipeiana Hui Tsz Chang, quien había conquistado tres éxitos (uno menos que la cubana).

¿Hace falta escribir que fue un combate muy cerrado? La cubana tuvo que apretar a fondo el acelerador en los compases finales, y lograr tres acciones consecutivas que la llevaron a un triunfo de 10-6.

¿Volvemos a sumar puntos a favor y en contra? ¡31 y 9!

POCOS DATOS

La curiosidad periodística, y como es lógico la obligación con los lectores de Cubahora, nos llevó a buscar datos sobre la campeona en la excelente base de datos de la Unión Internacional de Luchas.

Y la verdad es que en esa búsqueda no encontramos todo lo esperado. Bueno, es que también se encuentra casi empezando… Medalla de plata en casa en el torneo internacional Cerro Pelado del año 2017. Oro en el de 2018, ambos en febrero. La de oro ese mismo año, ocho meses después, en los Juegos Olímpicos de la Juventud. Quinta en el Gran Premio Ivan Yarygin, en enero pasado. Y este año plata en el Campeonato Panamericano.

La fuente citada no había reflejado todavía que es campeona mundial juvenil; pero a tono con el prestigio del sitio lo hará…

Ah… tampoco aparecen sus oponentes.

Habíamos prometido volver a un punto pendiente. Milaymis de la Caridad Marín Potrillé no participó hace pocos días en los Juegos Panamericanos de Lima 2019 (26 de julio al 11 de agosto).

La representante en su división fue Mabelkis Capote (76). Y no regresó a casa con las manos vacías: trajo una medalla de bronce. Quiere decir que esta corona de Milaymis de la Caridad Marín Potrillé dispara su rivalidad en casa con Mabelkis Capote. Un dolor de cabeza en definitiva agradable para el entrenador Filiberto Delgado, un viejo zorro de la lucha.

Antes de la alegría por el oro hubo otra con la plata del librista Yoanger Bastidas (97), quien protagonizó la primera de las dos finales de cubanos en estos campeonatos mundiales.

FALTA UNA BALA

Y a finales podría sumarse el domingo Gabriel Rosillo (97 del estilo grecorromano). Sí, es el mismo que hace pocos días logró de forma brillante, sin rendirse perdiendo en los segundos finales, la medalla de oro en los Juegos Panamericanos de Lima 2019, al vencer en la final al estadounidense Tracy Hancock, de la cual no refleja lo complicada que en realidad fue el marcador de 7-2.

Bueno, en lo que esperamos ahora por la llegada de Gabriel Rosillo… ¿nos aprendemos mejor, en realidad no es tan difícil, el nombre de Milaymis de la Caridad Marín Potrillé?