Hay acople en Vueltabajo

En el béisbol mundial, las estadísticas casi siempre transmiten claramente lo que sucede en determinada liga. Y la cubana, que este lunes iniciará la tercera subserie de su 57 Serie Nacional, no constituye la excepción.

Después de disputados seis de los 45 juegos que incluye esta primera fase clasificatoria, el líder es el elenco de Pinar del Río, conducido por el mentor debutante Pedro Luis Lazo, con balance de cinco victorias y un solo revés, que les encajó La Isla en la última fecha. 

Si revisamos los números, apreciaremos que los Vegueros no lideran ninguno de los tres departamentos fundamentales del juego: bateo, pitcheo y defensa. Pero eso sí, en todos están muy cerca de los conjuntos que les anteceden y por encima de la media general del torneo. Y eso ha sido clave en la posición de vanguardia que ocupan.

Por ejemplo, los Industriales del mánager Víctor Mesa, que comparten la segunda plaza con Ciego de Ávila, Las Tunas y Santiago de Cuba –todos con cuatro éxitos y dos descalabros-, marchan al frente del bateo con astronómico promedio de 333. Detrás se ubican el monarca exponente Granma (329) y Las Tunas (321), en tanto los Vegueros, que no poseen esa tanda terrible de sluggers como los anteriores equipos citados, conectan para 309, con 60 hits en 194 comparecencias al cajón de bateo.

Mientras, las áreas de pitcheo y defensa son encabezadas por el cuadro de Matanzas, que este año está dirigido por el debutante Víctor Figueroa. Los Cocodrilos lanzan para excelente promedio de 2.82. Pero detrás aparecen los Vegueros (2.83) que, sin dudas, tienen el mejor staff de lanzadores entre los 16 equipos en pugna.

En el reglón defensivo, los yumurinos lo hacen para 991, seguidos por los Tigres (990) y Granma (985). Los alumnos de Lazo exhiben promedio de 973 y se ubican sextos.    

Y si los números de Matanzas en esos dos aspectos son tan buenos, ¿por qué presentan balance de tres victorias e igual cantidad de fracasos y no encabezan la tabla de posiciones?, se preguntarán ustedes. Pues les comento que hay una marcada diferencia entre ese par de renglones y su cota ofensiva, que es de apenas 263, al pegar solo 45 hits en 171 veces al bate. A eso, súmese que de ese trío de triunfos, dos pertenecen a uno de los mejores zurdos de la actual pelota: Yoenni Yera.

Pero hay más en cuanto al acople en el juego. Industriales lidera el principal renglón que es la ofensiva con 333 y marcha bien con sus hombres encaramados sobre el box (3.53). Pero a la defensa ocupa el lugar 15 y penúltimo, con pálida cota de 956, al cometer 10 errores en 227 lances.  

Hoy no quisiera pasar la hoja sin comentarles lo que sucedió el pasado sábado en el estadio José Antonio Huelga. En el final del tercer inning, le tocaba batear al anfitrión Sancti Spíritus, que ganaba 5-0 a Ciego de Ávila. Pero llegó la lluvia y los árbitros detuvieron el partido. Cuando decidieron reanudarlo, el mánager avileño Roger Machado no envió a sus dirigidos hacia la grama y así ganaron los Gallos por forfeit (no presentación), algo que, imagino deberá ser analizado por los federativos cubanos del béisbol.

Este lunes se iniciará la tercera subserie del actual clásico cubano. Y por la tradicional porfía existente y la ubicación de ambos colectivos en la tabla de posiciones, el duelo Industriales-Santiago de Cuba, en el estadio Guillermón Moncada, colmará las mayores expectativas.

Las restantes subseries serán a base de Cienfuegos-Matanzas, La Isla-Camagüey, Mayabeque-Pinar del Río, Ciego de Ávila-Artemisa, Las Tunas-Holguín, Granma-Sancti Spíritus y Guantánamo-Villa Clara, siempre en terreno de los primeros.

Después de seis partidos, el líder de los bateadores es el mayabequense Michael González, quien promedia para 588 al conectar 10 hits en 17 veces al bate. El artemiseño Yoan Moreno y el veterano tunero Danel Castro, poseen tres cuadrangulares cada uno.