El Comité Olímpico Internacional sube más la parada a los trasgresores

Por supuesto, tanto el primero como el último funcionario del Comité Olímpico Internacional (COI) traduce perfectamente esa sentencia del oráculo que advierte: “Que no te atrape mucho la noche, para que disfrutes las mañanas”. Y aunque el mensaje-ultimátum posee, en alguna medida, un lenguaje figurado, resulta correctamente descifrado por las autoridades encargadas de mantener el “juego limpio”. Y ellos no se han quedado cruzados de brazos y siguen muy atentos al curso de conductas y posturas de los deportistas, con el fin de evitar daños en la anatomía de los muchachos o su desaparición física.

NUEVA ESTOCADA

Rodny Montes de Oca, director del Laboratorio Antidoping, formuló sus declaraciones sobre el asunto: “Las acrecentadas conductas negativas en diferentes naciones y encuentros estremecieron el entorno del deporte. Y, por esa razón, en 2018 los encargados de preservar solo para los libros las brillantes actuaciones modificaron, otra vez, el Código Mundial Antidopaje.

El científico precisó sobre la decisión: “El nuevo documento entrará en vigor el 1.^o de enero de 2021. Y será un nuevo cortafuego. Sustituirá al vigente, cuya fecha de implementación data del 1.^o de enero de 2015. En el mes de noviembre de este año se llevará a cabo su aprobación final, durante la V Conferencia Mundial de Dopaje en el Deporte a celebrarse en la ciudad de Katowice, Polonia. Todas las organizaciones antidopajes, federaciones nacionales e internacionales tendrán todo el año 2020 (año olímpico) para adecuar sus normas antidopajes y alinearlas con los nuevos requerimientos y planteamientos del nuevo Código.

”Entre las transformaciones con mayor implicación directa en los deportistas está la relacionada con el personal de apoyo. Muchas veces los deportistas se dopan por indicaciones de sus médicos o entrenadores. Por eso, la nueva versión de código también sanciona a ese personal de apoyo. Puede ser juzgado cualquier persona que, estando en condición de soporte, posea o trafique sustancias ilícitas; o esté en complicidad; o en asociación, con personas penadas por violar las normas antidopajes. Persistirá la suspensión de un máximo de 4 años para aquellos deportistas que infrinjan las leyes antidopaje. Mientras, otros furiosos directivos están pidiendo la suspensión de por vida como única vía de erradicar este flagelo y garantizar realmente un Juego Limpio”.

LAS CIUDADES ANFITRIONAS

A punto de finalizar este semestre ocurrirá en Lima, la capital de Perú, la celebración de los XVIII Juegos Deportivos Panamericanos. Y tal vez en la Ciudad de los Reyes los analistas tengan un acelerado ajetreo, porque los tramposos seleccionan esa cita para hacer sus fechorías. Durante la fiesta Toronto 2015, la cifra de trasgresores subió a 18 casos y borró la plusmarca de doce pícaros descubiertos en Caracas 1983.

“En la capital sudamericana —precisó Montes de Oca— se prevé analizar 1700 muestras de orina, más unas 350 de sangre, que incluirán el pasaporte biológico, la detección de CERA (un agente estimulante de la eritoproyesis al igual que la EPO) y la hormona de crecimiento. La toma de muestra estará a cargo de oficiales formados por la Organización Antidopaje de Perú más un grupo de oficiales internacionales que generalmente trabajan en el área. Aún se desconoce el laboratorio que analizará las muestras. Pero se sospecha que, como en ocasiones anteriores, la Panam Sport (antigua ODEPA) elija uno de los dos radicados en Estados Unidos, o el de Montreal, Canadá.

”A pesar de que cada año se incrementa la lista de sustancias prohibidas emitidas por la AMA, en la urbe peruana serán detectadas las mismas sustancias que en los eventos multidisciplinarios anteriores. Esto se debe al difícil acceso a otros regímenes de dopaje más sofisticados. Muchos de los últimos casos de dopajes en el área han estado relacionados con el consumo de suplementos nutricionales contaminados con las ya muy conocidas sustancias prohibidas estimulantes de sistema nervioso central y los esteroides anabólicos”.

MANCHAS

El primer evento multidisciplinario escenificado en nuestra área fueron los XXIII Juegos Deportivos Centroamericanos y del Caribe de Barranquilla, Colombia. Allí se realizaron 648 pruebas, entre ellas 170 de sangre. Según trascendió, varios atletas tuvieron resultado positivo a las pruebas realizadas. Ellos representaron a Venezuela, Panamá, Costa Rica y Colombia; así como dos caballos del deporte ecuestre: uno de Guatemala y otro de Venezuela. Los infractores en el escenario colombiano fueron: 1). Adamil Agüero de Venezuela: Positivo a higenamida, participó en ciclismo fue sexto en el kilómetro contrarreloj y decimo en Keirin. 2). Mariaestela Carolina Vilera de Venezuela: Positivo a higenamida, participó en ciclismo fue sexta en la prueba de velocidad, quinta en contrarreloj y séptima en Keirin. 3). Euclides Betancourt de Panamá: Positivo a cocaína, jugó béisbol como lanzador, 1 juego, 4 entradas. 4). Milagros Consuelo Mena de Costa Rica: Positiva a ostarin, ciclismo de montaña, ganó medalla de bronce, pierde su medalla si se mantiene el resultado de dopaje. 5). Manuel Esteban Soto de Colombia: Positivo a isomenopetano, participó en 20 kilómetros marcha, ganó medalla de plata, de mantener el positivo pierde su medalla. 6). Erick Barrando de Guatemala, bronce, sube a medalla de plata y Andrés Eduardo Olivas de México, del cuarto lugar a la medalla de bronce.

Y AHORA…

En Toronto se disparó la cifra de infractores. Aquel escenario norteamericano fue considerado un escándalo. La tierra de la cantante Chabuca Granda recibe el testigo de la urbe canadiense por la celebración de otra fiesta de la vida desde la tercera semana de julio, seguro crecerán sustancialmente las visitas a la capital peruana. Y ojalá los participantes tengan como brújula que la victoria es un derecho que valida la vida, siempre y cuando la ampare el juego limpio. Y eviten las apreciaciones-sentencias que caracterizan a las sedes de otros foros tras la jornada de clausura: “Previo a los Juegos de Río 2016 se revisaron pruebas de Beijing 2008 y Londres 2012. Las decenas de casos de dopaje encontrados determinaron el reacomodo de las posiciones finales y los medallistas. De los últimos Juegos de la Era Moderna, los más sucios son los escenificados en Londres, en 2012. Los analistas han encontrado, hasta ahora, 116 exámenes, positivos, 24 de ellos en halterofilia”.