Hoy todo se tiñe de rojo, que es el cursi y repugnante color de la felicidad, de lo enfermizamente parcial y del amor; todo junto, sí, de carretilla... Hemos conspirado día tras día para que así sea y, por eso, no toleramos cuentos de camino que nos hagan titubear o que nos vengan a robar la mística para ensuciarla con tortas de melaza.
La jornada es solo nuestra… mía y tuya y lo demás al diablo. Los del montón, si lo desean, que aprecien desde fuera, desde la frialdad de la pasión inerte, desde la envidia incluso; que miren, sí, que miren, pero a sabiendas de que no les toca.
Como intachables devotos –los más recalcitrantes–, hemos despejado el domingo para que nada de lo mundano nos conspire en contra. Hoy solo somos tú, yo y nuestra pasión confabuladora, insisto. Nos saldremos con la nuestra.
El móvil quedará en silencio para que ninguna llamada del maldito trabajo llegue a joder la hora sublime, donde se apiñan las ansias, el sudor, la contemplación, los miedos, las tensiones del segundo preciso, del vivir nuestro minuto –cada minuto de los nuestros– al extremo.
Nos habrá de entender el jefe, allá en la oficina. O quizás no, sospechamos que no tenga cómo sentirlo, pues no está aquí, en nuestros zapatos que ya van quedándose, despreocupados, por los rincones de la sala, o en nuestras pieles, sensibles al mínimo cambio en el ambiente… o cerca del vaso con alcohol que de a poco se consume.
Ese es nuestro contexto, nuestra kitch área de felicidad. Y el televisor… que de alguna manera nos salva la dicha, ante la imposibilidad de estar sentados donde queremos, tan juntos que nuestros alientos se confundan inclusive con el de los demás, donde nos choquen al pasar y nos griten y gritemos, como buenas bestias.
Pero que la peste en curso no nos enmudezca, que se impongan los poemas no escritos en nuestra humilde sala de TV prendida, donde, desde ya, cuelga roja la bandera y nos vibra entre dientes aquel “¡No pasarán!” de la república truncada. “¡No pasarán!”, musitamos entre risas. “¡No pasarán!”, nos consolamos ante el miedo de que el sueño, una vez más, como tantas, no descienda a la tierra.
Pero estamos juntos… tú y yo entre estas 12 paredes o tú en Valencia o Cartagena y yo en La Habana. Juntos: retando al amor, a la historia y al hombre mismo; retando burlas e incomprensiones; tú y yo desde cualquier parte en el rezo de un idéntico rosario y apostando por análoga fe.
Fanáticos, sí, desde la dicha hasta la desgracia. Con metafísicas inquietudes cada año –Sísifo nos convoca–, volvemos al seno del abismo para, desde ahí, emprender nuevo ascenso. A cuestas va la piedra. No es solo calvario.
Lo mejor de todo es el anhelo, ese bendito don de no saber el futuro, la voluntad de dar el cien ante la incertidumbre y la lucha de contrarios.
Es 14 de febrero, domingo, pelota... Corre esta postemporada de amor sin bombones. Tú y yo, camarada, hincha, parcial… después de haber reído con el fatal aterrizaje de El vuelo del gato, nos afilamos los dientes mientras colocamos junto a la butaca el caldero y el cacillo con los que retumbarán nuestras euforias, hasta deformar el fondo.
Con tal predisposición navegamos en estas aguas, que hasta a San Valentín hemos manipulado.
Atte.
Un matancero
*Nota del autor: Este artículo ha intentado “jugar” con el día del amor y el contexto deportivo de la jornada donde se enmarca, en la que se enfrentan los equipos de béisbol de Matanzas y Cienfuegos, en busca de un cupo a la semifinal de la 60º Serie Nacional… El objetivo ha sido “mojar” con algo de humor al San Valentín que corre, pero de ninguna forma parcializar a nuestros lectores. Cubahora manifiesta su respeto hacia estos dos excelentes equipos, les desea suerte y ansía que gane el mejor.
Carlos de New York City
14/2/21 19:41
"Cartas de amor (o) aquellas que haciamos en escribir a las familias y Amistades , enormemente las extraños , ya hace muchos años que la Carta de cualquier Indole de aquellas de amor y amistad ,dejaron de existir por el paso del tiempo, la tecnologia y el mundo moderno de un consumismo que da asco y repugnancias,no puedes ni mirar la television " aqunque yo deje de mirarla , para no pagar como un "bobo " y ignorante una factura de un cable al mes en mas de $64.00 porque llegara hasta los $120.00 porque tambien te cobran los taxes,el contro y la cajita.hace años que no miro la TV mas por las porquerias de programas , noticias violentas y desgracias humanas en el mundo, pa ' colmo un programa te ponen y cada 2 minutos y medios te ponen varios comerciales de propagandas y compras que duran casi 7 minutos y medio ? y me pregunto ? asi que estoy pagando por mirar la TV y encima de ello me meten a la fuerza los comerciales " me libre de esa porqueria y retomando mi amor por aquella pelota en mi Cuba querida , aquello si eran peloteros de verdad, Nadie DESERTABA ni salian en Laticas de Leche condensada remando para llegar a miami (o) otro pais,peloteros de grandes tallas y Humildes atletas,en Cuba eran equipos solamente y el de la isla, Pinar del Rio,dos en la habana , industriales y la habana, matanzas, camaguey y Oriente, Mirar aquel picheot de alarcon ,Abreu , la guagua, en Fin, ese Estado del CERRO, entrada Gratis, me gustaba hacer fila y entrar temprano y cuando soplaba algun FRIO suave y acojedor de en el invierno de cuba , alli en las cafeterias del Stadio del cerro , me tomaba un buen chocolate, Luego al salir , casi siempre se terminaba los juegos cerca de las 11 y media (o) 12 noche,nos cojia la CONFRONTA es decir , la guagua no pasaba tan seguido , pero era alegria y jubilos , caminar hasta el capitolio donde yo vivia detras y mientras aquel tumultos de gentes por las calles de Monte discutiendo de pelota y del juego,, aquello , eran hermosos Tiempos como era hermoso y bello escribir las cartas de amor , y hasta mandar los TELEGRAMAS que llegaban a tus casas en cuestiones de Horas y quizas de un dia , dando las felicitaciones y muchas veces alguna noticias de novedad entre las familias , "pero sobre la pelota de hoy , no me gusta, es como aqui la de aqui , no la miro, porque los peloteros los Cambian seguidos de unos equipos a Otros , y Pagar un Stadio del Yankee que solo fui una vez , no lo haria ni mas loco que estubiera , un Parqueo $18.00 dollas la Hora,una cerveza $ 10 y $12 , sentados, sentarte en los JARDINES $34.00 dollares y sentarte encima de tercera casi $264.00 hasta $600 dollares y si es detras del HOME " solo reservados para los Ricos y Millonarios que Pagan la temporada completa y valen mas de $1200 dollares ? Hay (o) no hay Desigualdad ? y entonces mejor mantengo mi hobby , Leer , Jugar ajedrez, hacer deporte como caminar y caminar, aveces correr y mirar pelicula , el cine , es mi pasion , Pero las cartas , Hubiera preferido aquella epoca en cuba , hasta 1974 epocas doradas y bellas en mi Cuba que no Hoy con mas equipos que ni puedo saber cuantos hay si se que hay muchos, era mejor , jugar como ante la selectiva y luego cada provincia por el campeonato.. Adios Hasta despues de Siempre aunque tengo muchas cartas Guardadas en mi cajon de familias y amigos y muchos recuerdos de aquel estadio del Cerro y de su gustosa cafeteria y restaurant.. ! De Gratis Porque el deporte amateur es la pasion de un mundo de antaño no el deporte de hoy que es esclavo para los atletas que firman mas convivir por meses lejos de la familia como aqui mismo..el atleta piensa en el Dinero , $$$$$ y Luego cuando se encuentra con una parte del contrato y con aquella esclavitud de no ser de ti mismo si no hacer lo que mantienen como discipina regida y fuerte , despues pagarle a los abogados , medicos , clinicas y masajes como los taxes en ese pais, en fin, el dinero te da el placer del momento pero no la felicidad ni el amor ,menos la epoca de escribir una carta , si no de llamar y pagar casi un dollar para hablar lo que antes tu escribias hasta de amor y solo pagabas un sello..... no Pagar por hablar y comunicarte con tu pais y familia...en fin; hay que vivir afuera de esa cuba y llevar no meses ni 2 años si no Varias decadas para que sepas " que no todo lo que brilla es oro y que el tiempo ni Perdona como nunca perdono a las CARTAS de amor..
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