Aun sin exacto color los platós ligueros

Por causa de los rendimientos en la pasada versión, a los analistas se les antoja vaticinar que las ligas de baloncesto, femenina y masculina, iniciaron en 2018 el camino del suspense. Y además, ellos sentencian que las nuevas versiones del evento instaurado en 1993, para los caballeros, y en 2010 para las damas, provocará desde el cinco de marzo un exponencial grado de emotividad por la experiencia que poseen los representativos de La Habana, Villa Clara y Santiago de Cuba, en las dos clasificaciones, así como los equipos de Ciego de Ávila, Matanzas y Guantánamo, en la rama varonil.

Entonces es válido pronosticar que, además de nuevos podios, es factible que germine un doble por el quehacer de los/as giraldillos y los lobos/ lobeznas.

No obstante cambiar la fecha de celebración, la Liga Superior de Baloncesto (LSB) constituirá el espectáculo que la afición espera desde hace algunas temporadas. Recobraron la fórmula competitiva (ronda preliminar de todos contra todos) Y, por esa razón,  sus campeones gozarán de mayor autenticidad pues destruirán anticipados pronunciamientos; demolerán a los colectivos que, sobre la duela, ratifiquen una ejercitación previa considerada como  de arroz con leche; y descubrirán a los falsos talentos.

Los combinados masculinos de Villa Clara, campeón defensor, Capitalinos, Matanzas, Sancti Spíritus, Camagüey, Santiago de Cuba, Guantánamo y Artemisa son estas vez los aspirantes a la  corona. Pinar del Río, titular en la liga 2017, quedó en el camino.

Las selecciones involucradas en la porfía de las damas son Sancti Spíritus, líder en el pasado encuentro, Capitalinas,  Pinar del Río, Santiago de Cuba, Guantánamo y Ciego de Ávila, formación que por primera ocasión pulsará con rivales acostumbrados a enfrentar la envergadura de la competencia.

Sin dudas, los eventos caseros propician, desde las primeras subseries, una mayor incidencia positiva en el ulterior quehacer de los jugadores/as sobre los parqués foráneos. La comisión técnica de la Federación Cubana de Baloncesto (FCB) mantuvo el rigor de la despedida.

Y ese criterio favorece al empeño de tener un equipo nacional integrado por hombres/mujeres curtidos. La semifinal de las damas está pactada a cinco cotejos. El adiós concluirá tras igual cantidad de desafíos. Las fechas topes, el 29 de abril y  8 de mayo. La penúltima etapa para los caballeros concluirá también  en cinco choques (29 de abril). El colofón de los varones se extenderá, como máximo, entre el 2 y el 11 de mayo, luego de siete tardes o noches.  

El calendario de las competencias siempre despierta alteraciones las personas presentes en los intercambios. Hubiese sido menos tendencioso conformarlo por los resultados de la pasada justa. Esa filosofía de propiciarles a los campeones una eliminatoria menos comprometida.

Soluciones y urgencias

El Villa Clara tiñó de naranja el firmamento de la pasada campaña. Parece que ¿los nuevos lobos? ahora conformarán una categórica historia, pues dejaron bocetos como anfitriones y visitantes en las canchas que, en esta versión, engalanarán nuevas pizarras. Desde este curso los baloncestistas cubanos necesitarán menos tiempo para ajustarse a las condiciones técnicas.

Quedan otras interrogantes por respuestas. Aquella tarde de 1993, jornada dedicada a la instauración de la LSB para caballeros, las autoridades del baloncesto en la Isla Grande del Caribe anunciaron que la cita tendría una notable participación tras la segunda década. Ha transcurrido más tiempo del previsto y la mayoría de las provincias del oriente del país declaran un lánguido progreso en el deporte. Ese detalle impide cumplir con la predicción.

El pliego más viejo del más dinámico y creativo de los deportes de equipo, advierte que los silbantes son  las figuras encargadas de impartir justicia y nunca deben ocupar el rol de protagonistas. Reitera que la función de esos hombres y mujeres es proporcionar que las jornadas competitivas sean fiestas. Y evitar que ellas se conviertan en soberanos conatos o batallas campales.

El documento, aunque carece de nombre, esclarece dónde empieza y termina el límite para el jugador y el juez. Y aclara: “Las tardes-noches, y las noches, dedicadas al juego de baloncesto, deben ser respetadas y adornadas de un buen quehacer; y no colmadas de chapucerías o actuaciones distantes de una adecuada conducta.

Los platós de las LSB carecen de un exacto color. De nuevo la vida indicará si prosigue, o desaparecerá, el actual cromatismo.

Clasificaciones generales (2013-2018)

Temporada  2018: 1. Villa Clara (13V-8D).  2. Avileños. 3. Santiagueros. 4. Camagüeyanos (todos con 12 victorias y 9 derrotas). 5. Capitalinos (11-10). 6. Matanzas (10-11). 7. Guantánamo (8-13). 8. Pinar del Río (6-15).

Temporada  2016-2017: 1. Pinar del Río 2. Matanzas 3. Villa Clara 4. Capitalinos. 5. Santiago de Cuba. 6. Ciego de Ávila 7. Camagüey 8. Guantánamo.   

Temporada  2015-2016: 1. Ciego de Ávila. 2. Capitalinos. 3. Villa Clara. 4. Guantánamo. 5. Pinar del Río. 6. Santiago de Cuba 7. Camagüey. 8. Artemisa.

Temporada  2014-2015: 1. Capitalinos. 2. Ciego de Ávila. 3. Artemisa. 4. Santiago de Cuba. 5. Pinar del Río. 6. Camagüey. 7. Las Tunas. 8. Guantánamo.

Temporada  2013-2014: 1. Ciego de Ávila. 2. Capitalinos. 3. Artemisa. 4. Camagüey. 5. Matanzas. 6. Santiago de Cuba. 7. Guantánamo. 8. Sancti Spíritus.

FEMENINO

Clasificaciones generales (2013-2018)

Temporada 2017-18: 1. Sancti Spíritu. 2. Capitalinas. 3. Guantánamo. 4. Pinar del Río. 5. Santiago de Cuba 6. Camagüey.

Temporada 2016-17: 1. Guantánamo. 2. Capitalinas. 3. Santiago de Cuba. 4. Camagüey. 5. Sancti Spíritu. 6. Pinar del Río.

Temporada 2015-16: 1. Pinar del Río. 2. Guantánamo. 3. S. de Cuba. 4. Capitalinas. 5. S. Spíritus. 6. Camagüey. 7. Villa Clara. 8. Artemisa.

Temporada 2014: 1. Pinar del Río. 2. Capitalinas. 3. Guantánamo. 4. S. Spíritus. 5. S. de Cuba. 6. Camagüey. 7. Villa Clara. 8. Artemisa.

Temporada  2013-14: 1. Pinar del Río. 2. S. de Cuba. 3. Capitalinas. 4. Guantánamo. 5. Villa Clara. 6. Camagüey. 7. S. Spíritus. 8. Artemisa.