"Atorada" con la pizza azurri, Cuba le dice adiós a Liubliana

No hubo cambios en el guion de juego ni en la manipulación del balón, y la historia se repitió. Víctima fundamentalmente de los errores no forzados que le acompañaron en la fase de grupos, la selección masculina cubana de voleibol cayó este sábado ante su similar de Italia por 3-1 (21-25, 25-21, 24-26, 18-25) en los octavos de final y se despidió del XX Campeonato Mundial que se disputa en las subsedes compartidas de Eslovenia y Polonia. Sobre el mondoflex situado en la Arena Stozice, de Liubliana, capital eslovena, la tropa del técnico Nicolás Vives estampó la peor rúbrica de errores propios en los cuatro juegos efectuados (44), superior incluso a los 41 que cometió en la derrota 3-2 contra Brasil en la fecha inaugural.

A este nivel, en el cual se reúne lo mejor del voly mundial, es pésima la cota de 158 pifias no forzadas en un total de 17 sets, lo cual exhibe un desastroso promedio de 9.29 por cada período y, por consiguiente, el saldo negativo de un triunfo contra el débil Qatar y tres derrotas, ante Brasil, Japón y la escuadra azurri. ¿Lo positivo de hoy? Creo que usted lo podría citar, incluso, sin haber seguido el juego. Claro está que fue la actuación del zurdo opuesto artemiseño Jesús Herrera, que lideró la puntuación cubana (23), de los cuales 19 fueron en ataque, tres servicios y un bloqueo. Herrera firmó 83 puntos en cuatro juegos, de los que 72 fueron en ataque. Para futuras citas deberá mejorar su servicio. Por demás, ha sido el máximo anotador en los cuatro juegos efectuados.

Acomodadores imprecisos, bloqueo (casi) nulo y saques totalmente descontrolados, se repitieron en esta tercera derrota del conjunto de Vives, quien confió mucho en sus atacadores-auxiliares Miguel Ángel López y Marlon Yant, enrolados ambos en un torneo para el olvido, si se valora el buen tino que muestran en las respectivas ligas foráneas en las que se desempeñan. Aportaron muy poco cuando se contaba con ellos para solventar un saldo de mejor valía. En este partido contra los europeos, Cuba se impuso en ataque (52x39), servicio (3x2) y en recepción (77 % por 67). Y cedió en el bloqueo, pues apenas logró cinco por 12 de sus rivales. Pero esa imperdonable friolera de 44 errores dio al traste con un mejor resultado, pues los alumnos de Ferdinando de Giorgi apenas cometieron 28.

La excelencia del pasador Simone Giannelli fue clave en el ataque de los italianos, que tuvieron como principal figura al opuesto Yuri Romano (14 puntos, todos en ataque), en tanto el central Roberto Ruso logró tres bloqueos. Con este resultado, Italia supera a Cuba en Campeonatos Mundiales de Voly, con cota ahora de seis victorias y tres derrotas. La última vez que un equipo cubano se impuso a otro del gigante sudamericano fue en la fase de grupos de la cita de 1990, por 3-0. Los caribeños también se habían impuesto en las citas del orbe de 1970 y 1974. En tanto, las anteriores derrotas han sido en las ediciones de 1956, 1978, en la fase final del año 90, en 1994 y en 2006.

Reitero que Cubahora había alertado sobre la cautela necesaria para encarar esta cita mundialista, y no creer mucho en las 15 victorias sucesivas que tenía este equipo luego del llamado a filas de los legionarios con clubes en Europa y Brasil, principalmente, cuando encararon varios eventos internacionales en el área y el Torneo Challenger. El voly es un deporte colectivo y un "Herrera" no hace verano. Esperemos entonces que Vives y su colectivo de entrenadores saquen experiencias de este pálido resultado, de cara a la participación de la escuadra nacional en la Liga de Naciones del 2023.