viernes, 29 de marzo de 2024

Las estrellas iluminan por el este

El equipo de Orientales ganó el desafío dominical y se puso delante en el pareo histórico...

Norland Rosendo González en Exclusivo 21/10/2019
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Pavel Quesada
El cienfueguero Pavel Quesada, ganador del Derby de jonrones, durante el Juego de las Estrellas correspondiente a la LIX Serie Nacional de Béisbol.

La región de oriente se fue delante en el pareo de Estrellas del béisbol cubano, luego de que este domingo le ganaran por 3-0 a Occidente con la séptima lechada que se propina en este tipo de desafíos y derrota a la cuenta del mismo lanzador que se anotó la victoria el año pasado.

La afición de esta ciudad volvió a colmar el parque Cándido González desde mucho antes de las dos de la tarde, hora de inicio de la final del derby de jonrones, y en el Día de la Cultura Cubana le rindieron homenaje a la recién fallecida Alicia Alonso con una exhibición del Ballet de Camagüey y un minuto de aplausos.

Después vino la definición del rey de los bambinazos, prueba liderada por el cienfueguero Pavel Quesada, quien vino a su segundo juego de Estrellas y se perfila como el antesalista del equipo Cuba en el Premier 12. Pavel sumó seis palazos de vuelta entera, con los cuales dejó atrás al anfitrión Alexander Ayala y al mayabequense Yasniel González.

Después vino el duelo que iba a quebrar el abrazo entre ambos bandos, pues solo ha tenido decisiones 30 partidos, uno quedó sellado y el de 1994 no debe ser tomado en cuenta debido a que los jugadores se mezclaron en Truenos y Centellas. No había mejor sede que una donde nunca se habían reunido tantas estrellas de antaño y ahora a la vez.

Durante medio juego la pizarra solo bostezaba, hasta que en el inicio de la segunda parte del desafío dos hombres del oeste pisaron la goma remolcados por el granmense Raico Santos, quien bateó de 4-3. Ambas anotaciones fueron a la cuenta del zurdo de Artemisa, Geonel Gutiérrez, refuerzo por Santiago de Cuba para el segundo tramo de la serie.

La última carrera del choque llegó en el octavo inning por imparable de Raico, error Luis Vicente Mateo en el campo corto y un pitcheo que no pudo capturar el cátcher Andy Cosme.

El derecho santiaguero Alberto Bisset se llevó el lauro de la victoria y el granmense Carlos Santana hizo lo que mejor ha hecho en la temporada, salvar, para deleite de un público que gozó y mostró gran disciplina durante los tres días.

Este fue el séptimo juego estelar en que uno de los equipos se va sin mover la pizarra y en cinco de ellos ha ganado el conjunto oriental.

Si el sábado el éxito correspondió a los veteranos de Occidente, en cuyo elenco estaba el hombre que más veces ha estado en juegos de Estrellas, el enmascarado espirituano Eriel Sánchez (11), ayer los estelares en activo de su región no pudieron imitarlos, pese a que Frederich Cepeda llegaba a su décimo choque de este tipo e igualó la marca de Danel Castro y Michel Enríquez.

Entre otras noticias trascendidas aquí, el próximo día 27 se reanudará el campeonato con la ausencia de los miembros del equipo nacional, una situación que sigue generando polémica, incluso, después que las autoridades deportivas y del torneo desaprovecharon una buena oportunidad para revertir una decisión con la que no simpatizan ninguno de los seis mentores que pasaron al segundo segmento.

Y también se han filtrado algunos proyectos de la dirección del Cuba para manejar su pitcheo en el Premier 12, aunque Miguel Borroto insista en que los juegos de preparación en Taipéi de China servirán, sobre todo, para definir la rotación y el lineup, en el que solo están seguros Alfredo Despaigne y Yurisbel Gracial.

Terminó la edición 33 de los juegos de Estrellas y los ojos de los aficionados cubanos se compartirán ahora entre el Premier 12 y la serie nacional, al tiempo que en la Serie de Japón los Halcones de SoftBank van delante por 2-0 y Despaigne va camino a ganar su tercer campeonato seguido en aquellos lares.


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Norland Rosendo González

Vivo de aprender todos los días a contar historias. Ya voy por el prescolar en la escuela de la vida. Me escapo del mundo para ver un juego de béisbol.


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