viernes, 19 de abril de 2024

¿Verano para solteros… invierno para parejas?

La tendencia muestra mayor intimidad en los solteros durante el verano, mientras que para las parejas estables el invierno es más atractivo...

Mayte María Jiménez
en Exclusivo 07/09/2012
2 comentarios
Verano7
Días de sol y arena incitan a millones de jóvenes a compartir, seducir y divertirse

En estos días una frase se ha vuelto muy frecuente entre los cubanos y cubanas a lo largo de toda la geografía: ¡qué calor! Aunque el verano recién comienza, las temperaturas están elevándose y las emociones también lo hacen, se incentivan los deseos, y se crean más oportunidades para intercambiar, descubrir nuevas historias, y aventurarse al romance.

Durante estos meses el cuerpo invita a ser más desenfadado, no solo en el vestir, sino también en el actuar.

Los especialistas señalan que en las vacaciones la sexualidad se libera, y se descarga toda la adrenalina contenida en la euforia de las festividades, tras el intenso período de trabajo.

El cuerpo está mejor dispuesto al goce y al placer, con una mente más abierta a la realización de nuestras fantasías sexuales. En esta etapa está comprobado que las personas se ponen más "cariñosas", aumentan las relaciones y los encuentros en escenarios que invitan al intercambio y la diversión.

Aunque no existen estadísticas definitivas que definan una relación directa entre las estaciones del año y la frecuencia sexual, las tendencias mostradas por la propia cotidianidad apuntan que para las personas solteras, el verano es más atractivo, mientras que para las parejas estables el invierno invita más a la intimidad.

Claro está que solo es una percepción, y que no todos sienten igual, ya sea acompañados, o en solitario. En el verano, por ejemplo, las personas tienden a tener mayor actividad social, y la vestimenta que se usa hace que las personas se sientan más "atractivas".

Mientras, se dice que los inviernos tienden a ser más activos entre las parejas estables desde el punto de vista sexual, pues durante este período hay mayor compenetración, y el ambiente invita a abrazarse para entrar en calor.

Ante tales tendencias algunos terapeutas y sexólogos señalan que el amor no depende del momento del año. Muchas veces los propios medios de comunicación tienden a estereotipar las relaciones y se concilia el verano y el calor con el erotismo y la libertad de expresiones corporales.

Sin embargo, tanto en una estación como en la otra, las circunstancias climáticas pueden condicionar atractivos y discrepancias, depende la creatividad y la iniciativa de los amantes.

SEXOLOGÍA ¿CLIMÁTICA?

La supuesta normalidad o mayor preferencia para la intimidad y el romance la debe establecer la pareja. Las soluciones para armonizar los ambientes son disímiles, y lo importante es aprender a ser atrevidos y sensuales, sin dejar de ser responsables.

No se trata de estigmatizar una época por encima de otra, sino de buscar actividades que motiven a la diversión, eso sí, sin dar pie a la promiscuidad, otra característica que tiende a asociarse con el verano.

El cuerpo humano, según advierten los especialistas, puede adaptarse a las variedades climáticas y está en condiciones de activarse sexualmente, tanto en el polo como en el trópico, pues las reacciones químicas no dependen del termómetro, sino de los gustos y preferencias individuales.

Un estudio austriaco reveló que los niveles de testosterona en los hombres aumentan con la vitamina D, producida por el organismo tras la exposición a la luz solar.

La investigación publicada en la revista Clinical Endocrinology y basada en análisis de 2.299 sujetos, demostró que los hombres que tenían cantidades suficientes de vitamina D presentaban también un mayor nivel en sangre de testosterona, la hormona sexual masculina por excelencia, que potencia la libido.

Esta hormona también lleva a cabo otras funciones esenciales, tanto en hombres como mujeres, como el mantenimiento de la fuerza muscular y la densidad ósea.

En tanto, en España una encuesta develó que los muchachos con edades entre los 18 y los 39 años son los más abiertos a disfrutar de nuevas sensaciones en el periodo estival.

Más de 75 por ciento de ellos afirma que tanto a ellos como a sus parejas les aumenta ese apetito.

Precisamente, es en verano cuando el 28,5 por ciento de los entrevistados reveló que ha sido infiel a su pareja, frente a un 71,5 por ciento que nunca lo ha sido; aunque un 39,2 indica que les gustaría probar la infidelidad durante ese período.

En cuanto a las fantasías sexuales, la principal arrojada en la indagación es hacer el acto sexual dentro del agua, con un 36,3 por ciento de los sondeados.

ETERNO VERANO... PERO CUIDADO

En Cuba el período vacacional tiene entre sus principales atractivos las actividades relacionadas con las playas, así como con fiestas y encuentros multitudinarios de personas en conciertos, noches del libro, entre otras. Días de sol y arena incitan a millones de jóvenes a compartir, seducir y divertirse.

Sin embargo, hay dos elementos que no se pueden perder en medio de la euforia y el placer de la recreación. Por una parte es la responsabilidad sexual de cada persona, y por otra los cuidados que se deben tener al exponerse al sol. Hay que tener presente que la región del Caribe recibe fuertes radiaciones ultravioletas, especialmente en los horarios entre las 10 de la mañana y las 4 de la tarde.

Salvando estos dos factores, los jóvenes disfrutan del verano, en grupos, en pareja y de manera solitaria, en el caso de los que aún no se han tropezado con cupido.

Para Claudia, una joven capitalina, de 20 años, esta es una etapa que invita a seducir, que le hace soñar y divertirse, donde se entrega y se siente libre al relacionarse con sus amigos y su pareja. A pesar del calor agotador, prefiere estos meses, pues según ella son los más activos.

Mientras, Marcos R, su amigo, confiesa que el calor le hace sentir más vivo, con deseos de hacer y desinhibirse de temores. Considera que el verano es la estación de la vida, donde todo es azul, donde el deseo y el romance no faltan, para olvidar las nostalgias de un invierno pasado.


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Mayte María Jiménez

Periodista del Diario Juventud Rebelde y editora del Suplemento En Red, dedicado a Ciencia, Salud, Tecnología y Medio Ambiente. Aborda temáticas relacionadas con juventud, sociedad, salud, ciencia, economía y otros tópicos de la actualidad nacional de Cuba. Coautora del libro Periodismo incómodo: la cuadratura del círculo, de la Editora Abril

Se han publicado 2 comentarios


sh@kir@
 22/11/13 12:14

A mi me encantan los últimos meses del año para encontrar pareja, no se si es que a coincidido que las pocas relaciones que he tenido siempre llegan en esta etapa pero me encanta pasar esos meses frescos, porque frío casi ni hace,acompañada de una nueva relación nueva y más fresca como esa etapa del año.

DrelosK
 7/9/12 15:39

Hola, resulta que llevo un tiempo con una muchacha, con la cual al principio me sentía muy bien, incluso tener sexo no era indispensable, ahora me sigo sintiendo genial con ella, solo que la deseo y tengo ganas de tener sexo con ella, pero no se como pedírselo, ya que no quiero llevarla a un lugar indiscreto, pero ella tampoco quiere ir a mi casa.

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