Los teléfonos celulares son uno de los equipos más utilizados por la población en general en la vida cotidiana desde hace algunos años. Fueron pensados como una tecnología social capaz de permitir la rápida o casi instantánea conectividad en tiempo real con otras personas sin necesidad de su presencia física alguna.
UNA INVESTIGACIÓN INTERESANTE
En una investigación realizada en la Universidad Politécnica de Madrid y la Facultad de Psicología de la Universidad de Oviedo, en España, y publicada en la revista Social Science Computer Review, se evidencia cómo un uso compulsivo de los teléfonos móviles por algunos de sus usuarios no solo no mejoran nuestras relaciones sociales, sino que podría incluso poner en peligro algunas de ellas, donde se incluyen las familiares.
Los investigadores realizaron un seguimiento durante un año a 416 usuarios de teléfonos inteligentes estudiando la relación entre su adicción al uso de los mismos, el apoyo social obtenido a lo largo del tiempo y sus niveles de angustia psicológica.
LOS RESULTADOS DE LA INVESTIGACIÓN
A mayor adicción al teléfono móvil también aumentaron los niveles de estrés psicológico de los usuarios. Aparecieron también consecuencias negativas similares a las de otras adicciones, como sucede con la adicción al juego, así como la mala adaptación psicológica y un aumento de los problemas y los conflictos con familiares y amigos.
El estudio relaciona el uso exagerado del teléfono móvil con un mayor aislamiento social y mayores niveles de mala adaptación psicológica, incluidos problemas variados en el trabajo y conflictos de diversa índole con familiares y amigos.
UNA PÉRDIDA EVIDENTE
Utilizar el teléfono móvil de un modo compulsivo y contra la creencia de algunos ingenuos, hará tener menos amigos y más estrés. Es mucho el tiempo empleado en estos equipitos, artilugios que nos hacen perder útiles amistades y restado a cultivar las más sanas y provechosas relaciones sociales en el bien presente y futuro de la propia persona.
Otros estudios similares también comparten la idea de cómo las tecnologías de la comunicación actuales pueden llegar a conducir al aislamiento social, y eso tiene consecuencias negativas para el bienestar en la vida de las personas afectadas por esta adicción a su celular.
HISTORIA DE LAS BUENA INTENCIONES DE LOS TELÉFONOS CELULARES
En un primer momento los teléfonos celulares fueron diseñados como una herramienta capaz de facilitar el contacto con otras personas y la relación y la socialización con ellas; pero su uso compulsivo en prácticamente todos los países del mundo, está derivando en consecuencias muy alejadas de esa buena y loable idea inicial.
En vez de estimular una mayor interrelación entre las personas, la adicción a los teléfonos inteligentes y el apoyo social real y tangible se relacionan negativamente a lo largo del tiempo pues a más adicción muchos menos apoyo social.
Incluso las trayectorias en el tiempo del apoyo social conquistado inteligentemente entre individuos están influenciadas muy negativamente por los niveles anteriores de adicción, y por supuesto, tiempo empleado en el teléfono celular.
UNA FACILIDAD PELIGROSA
La versatilidad de estos modernos y aparentemente utilitarios teléfonos inteligentes para la comunicación entre personas, tiene el peligroso potencial de promover un uso cada vez más extenso en la vida diaria, sobre todos los que los utilizan como una herramienta imprescindible y vital del cual prácticamente no pueden prescindir.
Pero en estos momentos aun con estudios transversales muy limitados fundamentalmente entre universitarios, estamos comenzando a encontrar resultados nada estimulantes y se está alertando sobre sus posibles consecuencias negativas asociadas.
La importancia de investigaciones como la mencionada radica en la futura selección de una muestra representativa de la población española y hacerles un seguimiento más duradero en el tiempo a los usuarios, algo fundamental para seguir avanzando en estos aspectos a la larga beneficiosos y útiles para la humanidad y sus relaciones reales, tangibles y cuantificables entre personas.
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